- Una buena forma de salar sin sal es añadiendo a tus platos alimentos con mucho sabor y ricos en sodio como por ejemplo las alcaparras. También puedes añadir uvas pasas, aceitunas o salsa de mostaza.
- Los cubitos de caldo también contienen una gran cantidad de sodio y puedes añadirlos a tus guisos. Sin embargo, te recomendamos que hagas tu propio caldo con productos como el apio, la zanahoria, espárragos o remolacha. Su contenido en sodio es alto y no conviene abusar.
- Si aún no eres fan de la pimienta negra molida, pruébala para condimentar la pasta, los huevos revueltos, pizzas, pescados o sopas. En poco tiempo la preferirás a la sal.
- También puedes añadir especias a tus platos de pasta, verduras y carne. Son excelentes sustitutas de la sal. Algunas de ellas además tiene propiedades muy beneficiosas para tu salud. Es el caso del jengibre, el ajo, la cúrcuma, el curry o el chile.
- ¿Tienes un jardín o terraza? Cultiva tus propias finas hierbas y añádelas a tus platos. También puedes tenerlas si cuentas con una cocina con luz natural y soleada. Te recomendamos la albahaca, el perejil, el cilantro, la mejorana, el tomillo, el romero, el eneldo o el apio. Si no dispones de espacio para prepararlas, puedes adquirirlas en cualquier establecimiento.
5 maneras de salar tus platos sin sal
El exceso de sal en la dieta puede ocasionar problemas de hipertensión o retención de líquidos. Existen muchas maneras de condimentar tus platos sin recurrir a este mineral. Pruebas estas.
