Estamos en plena primavera y el cuerpo lo sabe. Por eso, ahora que los días se alargan cada vez más y una ya no sabe qué plato cocinar, es momento de equilibrar nuestra dieta e incluir en ella los alimentos de temporada del mes de abril. Los guisantes son una opción genial, ya que a diferencia de otras legumbres se pueden comer incluso crudos. Hoy vamos a descubrir cómo incluirlos en tu dieta, así como sus grandes propiedades nutritivas.
Para empezar, quítate de la cabeza el típico plato de guisantes con jamón. No es que no nos valgan, sino que existen muchas otras opciones ricas, saludables y saciantes. Indagar en la cocina será tu misión esta primavera. Pero, sobre todo, es el mejor momento para aprovechar alimentos antimflamatorios de temporada como los guisantes. ¡Riquísimos con un buen acompañamiento!
¿Sabías qué los guisantes poseen interesantes propiedades que ayudan a mejorar la circulación de la sangre y prevenir enfermedades del corazón?
Además, si recomendamos los guisantes es por varios aspectos. Son únicos, fáciles de acompañar y, además, son ricos en;
- Vitamina C
- Vitamina del grupo B
- Minerales como el calcio y el magnesio
- Fuente de alfacaroteno y betacaroteno, dos antioxidantes muy recomendables para la salud de nuestros ojos, piel y mucosas
- Contienen una elevada cantidad de fibra soluble e insoluble
Este último aspecto, el de tener una importante cantidad de fibra, hace que los guisantes sean ideales para favorecer el tránsito intestinal. También ayudan a disminuir el colesterol malo en la sangre y aportan azúcares que se van incorporando al torrente sanguíneo.
Es decir, que no solo contienen importantísimos valores nutricionales, también son ideales porque mantienen los niveles de azúcar dentro de la normalidad, ayudándonos a estar saciados durante bastante tiempo.
¿Cómo usarlos?
Si hace tiempo hablábamos de las propiedades de la quinoa y os dejábamos con algunas recetas para cocinarla, hoy el plato fuerte son los guisantes. Hemos recogido una amplia variedad de recetas sanas y equilibradas para que elijas las que más vaya con tus gustos e intereses. A cada persona, ¡un paladar!
Recuerda que los guisantes se pueden emplear en multitud de platos, desde ensaladas hasta cremas, revueltos y salteados. En la cocina podrás encontrarlos frescos, congelados, secos o en conserva. Perfectos para multitud de recetas y platos nutritivos. Por otro lado, la harina de guisantes BIO es un ingrediente que puedes usar en recetas como sopas y repostería. También está indicada para rebozar o espesar sopas y cremas.
Elige entre platos fríos como una exquisita ensalada verde, otros más calentitos como un guiso o incluso cremas, salsas y, ¡tachán!, hasta un hummus de guisantes para un pica pica en compañía. ¿Estás ya convencida de cuál puede ser tu match en la cocina?
