El vinagre es un popular alimento fermentado que viene utilizándose durante siglos y sumamente apreciado por sus diversas propiedades. Sus usos son bien variopintos, desde la cocina como aliño, en escabeches, encurtidos y conservas, pasando por remedios faciales y capilares, como producto de limpieza, ¡hasta remedios medicinales!
De hecho, ya decía bien Hipócrates, el padre de la medicina, que esta bebida podía limpiar heridas, llagas, e incluso sanar la tos y los resfriados. Vaya, “un para todo”. Y, si bien su origen es incierto, parece ser que lleva utilizándose desde hace más de 3.000 años.
¿Sabíais que empezamos a tener el primer testimonio escrito de su uso en el Imperio romano? Así es, el gastrónomo Apicio, contemporáneo del emperador Tiberio, nos presenta las primeras recetas con vinagre en el libro de cocina más antiguo que se conoce en la cultura occidental “De re coquinaria”. Interesante, ¿verdad? ¿A quién no le gustaría hojear esas recetas?

El vinagre de manzana, propiedades y elaboración
Dentro de sus muchas variantes hoy nos centramos en el de manzana que, sin filtrar ni pasteurizar, es un alimento fermentado con un alto contenido de enzimas y probióticos. Si bien ha sido muy utilizado en las cocinas del norte de Europa, cada vez más lo encontramos en nuestras mesas debido a sus múltiples propiedades.
El vinagre de sidra de manzana se consigue mediante un proceso biológico de fermentación. En una primera fase se obtiene el alcohol mediante el prensado y la fermentación de las manzanas, y en una segunda fase de fermentación la actividad de las bacterias transforma el alcohol etílico en ácido acético, el responsable de su típico sabor y aroma.
La Mycorderma aceti, también conocida como la "madre del vinagre" o solo "madre", es la bacteria que lo convierte en un alimento probiótico excelente para nuestra flora intestinal y para el organismo en general. Es lo que da ese aspecto turbio que únicamente encontramos en los vinagres sin procesar y sin filtrar.
Opta siempre por un vinagre sin filtrar, sin pasteurizar, con la “madre” y libre de sulfatos. De esta manera nos aseguramos un mayor aporte en enzimas, minerales, oligoelementos, vitaminas, flavonoides, aminoácidos, pectinas, antioxidantes… cada uno de ellos muy beneficiosos para la salud.

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Beneficios del vinagre de manzana
Como te decíamos antes, esta elaboración tiene muchos usos por todas sus propiedades, pero algunos de sus beneficios más destacados son:
- Regula el azúcar en sangre. La alimentación desequilibrada y el estrés continuo nos exponen a constantes picos de glucosa en sangre. Añadirlo en la dieta, ya sea antes de las comidas o como aliño, es una manera muy eficiente de aplanar las curvas de glucosa sin aumentar la insulina. Además, el ácido acético penetra en el músculo y lo impulsa a producir glucógeno más rápido de lo habitual, lo que supone una mejor absorción de la glucosa y, en consecuencia, menor carga de glucosa dando vueltas por el organismo.
- Favorece la pérdida de peso y la grasa abdominal. Reduce el porcentaje de grasa corporal debido a su actividad antiglucémica y su efecto saciante.
- Propiedades digestivas. Facilita la secreción de jugos gástricos y enzimas, ayudando a las digestiones y evitando la hinchazón, las flatulencias y el malestar abdominal. Asimismo, a través de a su acción probiótica nos regulariza la motilidad intestinal mejorando así el estreñimiento.
- Apoyo cardiovascular. Apoyo en la reducción de los niveles de colesterol y triglicéridos gracias a la acción de los polifenoles como el ácido clorogénico, contribuyendo así a mejorar la presión arterial y a una buena salud de los vasos sanguíneos.
- Cuidado de la piel y del cabello. Sus propiedades antimicrobianas, antiinflamatorias y seborreguladoras, gracias al ácido málico y acético, actúan como tónico facial. Devuelve la luminosidad al cutis y absorbe el exceso de grasa, siendo ideal en el tratamiento de acné y espinillas. También unifica el tono y combate las manchas producidas por el mismo envejecimiento y la exposición solar. Eso sí, debe ir siempre diluido en agua, nunca aplicarlo directamente. La proporción suele ser de una parte de vinagre por tres de agua.

¿Cómo usar el vinagre de manzana para perder peso?
Como te decíamos, puede ser un aliado para perder peso, pero no sirve tomarlo de cualquier manera y descuidar la alimentación. Diluye una cucharada sopera de vinagre de manzana en un vaso de agua. Tómatelo 20 minutos antes o 20 minutos después de comer. Y sí, el vinagre del aliño de la ensalada también nos serviría. Aconsejamos utilizar siempre una cañita para no dañar el esmalte.
Especial precaución personas con gastritis, úlceras estomacales o cualquier patología gastrointestinal. En caso de sufrir diabetes, es altamente recomendable que lo consultes con tu médico, ya que el vinagre de manzana puede alterar los niveles de glucosa en la sangre.
¡Ya veis! El vinagre de manzana puede ser tu gran aliado. Pero ¡recuerda! No debemos olvidar que es una pieza más del puzle, puesto que siempre debe ir acompañado de una dieta equilibrada, rica en alimentos probióticos y prebióticos y ejercicio. ¿Te animas?
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