La gastronomía es uno de los elementos que más se valoran cuando se planifica un viaje, y su calidad influye mucho en la decisión de los turistas a la hora de seleccionar alojamiento. Es por eso que el mundo del desayuno de hotel se está reinventando con una oferta más saludable que cada vez cobra más fuerza para ofrecer a los huéspedes una selección de productos más sostenibles.
Uno de los ejemplos más claros es el de Josep Moré, un chef mallorquín especializado en los buffets de hotel, que ha desarrollado una nueva concepción con desayunos más equilibrados, accesibles para todas las personas que tienen alguna intolerancia y personalizados. Harto del desperdicio de alimentos y de su mala calidad, Josep se ha propuesto ofrecer comida más sana, más sostenible y más atractiva, pero sin perder la ambición en la vanguardia gastronómica e incorporando una nueva forma de presentar los platos.
Desayunos saludables e inclusivos
Comer con conciencia es fundamental para los clientes preocupados por su bienestar y el desayuno de hotel sano y saludable se convierte en el mejor reclamo gastronómico. Que sea una experiencia beneficiosa para la salud del cliente se convierte en el principal objetivo del hotel. Para conseguirlo, el buffet de excesos tradicional, deja paso a un buffet muy estudiado siguiendo las pautas nutricionales más importantes.
Por tanto, este cambio radical en la concepción del buffet de desayunos también tiene que tener en cuenta al cliente con necesidades alimenticias especiales. Las alergias e intolerancias más comunes, hoy en día, tienen su respuesta gastronómica. De este modo, Josep ha dividido el buffet del desayuno en distintas zonas diferenciadas para que los clientes los identifiquen y encuentren más fácilmente. La oferta más saludable se encuentra en la zona “healthy” mientras que hay otras secciones como la “cocina al momento”, la de desayunos locales y también de productos especiales, en concreto sin gluten, lactosa o azúcar.
Algunos de los productos que se ofrecen en la zona “healthy” son frutas, semillas, frutos secos, yogures variados, leches vegetales, quesos bajos en calorías, zumos naturales e incluso détox. Todo ello acompañado de una gran variedad de tés e infusiones para complementar el desayuno.
Cocina en vivo
El espectáculo gastronómico que se crea cuando el equipo de cocina atiende, elabora y sirve las peticiones del cliente, es la forma más acogedora de recibir a los huéspedes por las mañanas. Disfrutar de la mejor hospitalidad mientras se degustan los platos elaborados al instante hacen la diferencia respecto a los buffets de siempre.
Las elaboraciones más clásicas se combinan con la gastronomía saludable en la zona de cocina en vivo con platos como jamón york a la plancha, huevos pasados por agua, tortillas de vegetales o verduras al grill, que toman el relevo para posicionarse cómo las estrellas del evento.
Producto local y conciencia medioambiental
La sensibilidad hacia el medio ambiente, así como el poder disfrutar de la gastronomía local, hacen que también se apueste cada vez más por los productos de proximidad o de kilómetro 0. Se sensibiliza al cliente en la cultura del entorno mientras degusta un desayuno espectacular con productos como huevos eco, mermeladas caseras, fiambres de la zona, miel de cercanía, quesos del lugar o frutas de temporada, que conforman un universo gastronómico único y diferenciador.
La preocupación medioambiental también hace que los hoteles tomen consciencia del impacto directo de su actividad en la naturaleza y, como en el caso de Josep, utilicen envases y vajillas ecológicas y busquen reducir a mínimos el desperdicio de alimentos.