Típica del sur de Europa y especialmente de la zona mediterránea, el hinojo es una hierba con hojas verdes perennes y con un bulbo en la parte inferior que tiene un aroma delicioso. Éste es el elemento que se emplea en la gastronomía y en la fitoterapia, entre otros ámbitos. Antiguamente se consumía entre los soldados durante las batallas, así como entre los monjes para superar los largos ayunos, ya que el hinojo se relaciona con la reducción del apetito.
Sus propiedades no terminan aquí, ya que es un alimento muy completo en cuanto a beneficios para el organismo. Para mejorar la digestión, ayudar a eliminar líquidos, calmar dolores varios (dolor de estómago, dolores relacionados con la menstruación, o aliviar los ojos cansados, entre otros), reducir la caída del cabello o combatir la anemia, el hinojo puede ser la mejor solución. Asimismo, el consumo de hinojo también se utiliza para reducir los altos niveles de colesterol en sangre, para prevenir enfermedades coronarias y también por sus propiedades expectorantes, para la bronquitis y la tos.
El aceite de hinojo puede ser útil cuando se aplica sobre la piel para el tratamiento de la enfermedad del Alzheimer. Esta planta también puede ser consumida en infusión, así como un alimento común, ya sea en ensaladas, hervido, al vapor o en salsas, por ejemplo. Sus semillas se utilizan para combatir el mal aliento, pero también se pueden incluir en panes, pasteles o bizcochos. En general, el hinojo es un alimento muy completo y una planta con propiedades muy interesantes para un amplio abanico de dolencias y dolores.
Hinojo, la planta mediterránea con abundantes ventajas
Además de tener un excelente aroma, el hinojo tiene propiedades positivas para las distintas funciones del organismo, desde la digestión al sistema nervioso.
