Para muchas mujeres, la retención de líquidos se convierte en un quebradero de cabeza constante. Como consecuencia de este desagradable padecer, la báscula se hace eco en mayor o menor medida. El calor, pasar muchas horas de pie o sentada, la alimentación rica en sal, los desequilibros hormonales como el embarazo, los días previos a la menstruación o la menupasia y la toma de determinados medicamentos son el caldo de cultivo perfecto para la retención de líquidos.
La nutricionista María Astudillo, especialista en elaboración de dietas y co-directora de ALEA ha preparado un menú semanal para paliar o, al menos, contener sensiblemente esta molestia tan habitual entre nosotras.
Lunes
· Desayuno
Pan integral con unas gotas de AOVE, café con leche y fresas
· Comida
Alubias con setas y cebollino + bocadito de pavo
· Cena
Pollo guisado con ciruelas y piñones
Martes
· Desayuno
Copos de espelta con nueces y leche
· Comida
· Cena
Miércoles
· Desayuno
Pan integral con mantequilla de cacahuete, plátano y té americano
· Comida
Lentejas con calabaza y curry + ternera al ajillo
· Cena
Bacalao con salsa tártara y champiñones
Jueves
· Desayuno
Yogur con copos de avena y fresas
· Comida
Ensalada de quinoa y pepino + lenguado a la plancha
· Cena
Viernes
· Desayuno
Pan integral con aguacate, café con leche y melón
· Comida
· Cena
Ensalada mejicana con gambas picantes
Sábado
· Desayuno
Tortitas de avena integral con yogur y nueces
· Comida
Ensalada de garbanzos, queso feta y uvas
· Cena
Domingo
· Desayuno
· Comida
Salmorejo + ternera a la naranja
· Cena
Todos los días
· Almuerzo
Una infusión de té verde, o manzanilla, o cola de caballo + 1 pieza de fruta de temporada
· Merienda
Una infusión de té verde, o manzanilla, o cola de caballo + 1 pieza de fruta de temporada
Además del menú, que promete beneficios a la hora de aumentar nuestras visitas al baño, Astudillo propone una serie de recomendaciones a tener en cuenta:
1. Procura mantenerte más activa: el ejercicio físico activa a nuestro sistema circulatorio, y en concreto favorece el retorno venoso de las piernas, con lo que se impedirá la acumulación de líquido en las extremidades inferiores.
2. Si es posible, mantén las piernas en alto un par de veces al día durante unos cinco o diez minutos cada vez.
3. Evita la sal, que también promueve la retención de líquido.
4. Verás que hemos incluído todo tipo de infusiones: y es que ya solo tomar agua favorecerá la eliminación de líquido (pues obligaremos a nuestros riñones a trabajar más), pero encima si la tomamos con té verde, con manzanilla, con cola de caballo conseguiremos un efecto diurético mucho más pronunciado.
