En medio de las Navidades, empezamos nuevo mes y nuevo año, probablemente, un poco empachados… Las comilonas típicas de Navidad, cargadas de dulces, de alcohol, de grandes cantidades de proteína animal o de gluten, pueden dejarnos una intensa sensación de indigestión y de hinchazón, ya que probablemente habremos cambiado notablemente nuestra dieta habitual.
Como ya te hemos ido contando, es bueno que moderes un poco tu ingesta, pero sin obsesionarte. Y que aproveches los días entre fiestas y toda la bajada de enero para limpiar tu organismo de la acumulación de toxinas de las Navidades y aproveches para darles un respiro a tus órganos digestivos. Ahora, es un buen momento para hacer una dieta temporal eminentemente vegetariana, sin gluten, sin azúcares y sin lácteos, con el fin de recudir la inflamación provocada por los excesos y sentirte mucho más ligera y llena de energía.
Confía también en el poder medicinal de muchas plantas y apuesta por infusiones depurativas y diuréticas que te ayudarán a hidratarte y a descongestionar tu organismo. También te ayudará rebajar o eliminar la ingesta de café, que puedes sustituir por café de achicoria, por un estimulante té matcha o por una infusión especiada de efecto energizante. O también puedes sustituir temporalmente (aunque te recomendamos hacerlo para siempre) los postres por infusiones.
Además de adaptar este tipo de rutinas rutinas, este mes de invierno, el campo sigue trayéndonos buenos alimentos de temporada que también nos ayudarán en nuestro proceso depurativo post-Navidad. Seguimos pudiendo disfrutar de muchas frutas y verduras accesibles durante los meses más fríos del año, como el aguacate, el brócoli, las espinacas, las coles, los nabos, los puerros, el cardo o el kiwi.
Además de todos estos, aquí tenéis nuestra pequeña selección de frutas y verduras que están en plena temporada de enero y que conviene consumir regularmente, sobre todo si son de producción local: