El pescado debería ser un alimento habitual en nuestra dieta diaria sin embargo es un alimento que no cuenta con el beneplácito de la mayoría de comensales. Solemos vincularlo a recetas complicadas y elaboradas que no caben en nuestra ajetreada jornada, pero nada más lejos de la realidad. Además de ser un alimento sumamente beneficioso –algunos pescados son un auténtica medicina– para nuestro cuerpo, gracias a que nos aporta un elevado número de propiedades y nutrientes, el pescado puede ser igual o más fácil de preparar que muchos otros platos. El tártar de salmón o esta receta, con el gallo como protagonista, son un claro ejemplo. Sigue el paso a paso y te sorprenderá que preparar este rico plato no te llevará más de 20 minutos.
Ingredientes (para 4 personas):
> 4 gallos frescos
> 4 patatas medianas
> 3 dientes de ajo
> 1 puerro
> 4 cucharadas de agua embotellada
> el zumo de 1/2 limón
> hojas de perejil fresco
> pimienta
> sal
Preparación:
Pídele al pescadero que retire la cabeza y las espinas exteriores del pescado. Una vez en casa, lávalo con agua fría y sécalo con papel de cocina o con un paño. Precalienta el horno a 180 ºC. Mientras tanto, pela patatas y córtalas a rodajas de algo más de 1cm de grosor. Lava también el puerro y córtalo a rodajas parecidas. Unta con aceite una bandeja apta para horno y coloca las patatas. Como tardan más en cocerse que el pescado y el puerro, introdúcelas en el horno 10 minutos antes para que se vayan asando. Reduce la temperatura a 150 ºC.
Pela los dientes de ajo y, en un mortero, pícalos junto con las hojas de perejil. Agrega el aceite, el zumo de limón, una pizca de sal, otra de pimienta y el agua, mézclalo todo. Transcurridos los 10 minutos, retira la bandeja del horno y dale la vuelta a las patatas, coloca el pescado y el puerro en la bandeja y vierte por encima la picada del mortero, procurando que quede bien cubierto. Vuelve a introducir la bandeja en el horno y déjalo entre 10 y 15 minutos (en función del tamaño de los pescados), a 150 ºC, controlando la cocción. Sírvelos calientes.
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