Toda gran festividad que se celebra alrededor de la mesa, como la Navidad o la Nochevieja, empieza por los aperitivos. Mini-bocados que visten la mesa de color, abren el apetito y dan inicio a la velada.
La ventaja de los aperitivos es que permite preparar y degustar muchas opciones distintas, de modo que cada comensal podría escoger aquellos bocados que más le apetezcan. Pueden ser canapés fríos o calientes y de sabores y texturas diferentes. Los más típicos en estas fechas navideñas son las tablas de quesos y jamón, las bandejas o cocktails de gambas, los patés vegetales con tostadas o crudités, los volovanes rellenos… Pero, más allá de estos, ¡podemos elaborar una gran infinidad de opciones curiosas, originales y creativas!
¡Os invito a hacer volar la imaginación con algunas de mis ideas favoritas!
Algunas de ellas: blinis con olivada y salmón ahumado, vasitos de crema de calabaza y jengibre, tártar de mango con aguacate y gambas o champiñones rellenos con huevos de codorniz.
Además de estas que os acabo de mencionar, uno de mis aperitivos favoritos son los huevos rellenos. Una receta que tradicionalmente se sirve con relleno de atún y mayonesa, pero que a mi me gusta modificar con opciones diferentes: crema de aguacate, ensaladilla rusa o, mi favorita, paté de calabaza y caballa. Un aperitivo vistoso, fácil de consumir en un bocado y lleno de sabor.

Ingredientes (para 6 personas, contando 2 unidades por comensal)
- 6 huevos ecológicos
- 250 g de calabaza
- 40 g de filetes de caballa en conserva
- 30 g de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharada de tahin
- 1 cucharada de zumo de limón
- 1 cucharadita de sal marina
- ½ cucharadita de comino en polvo
- ½ cucharadita de cúrcuma en polvo
- Una pizca de pimienta negra
- Para decorar (opcional): Cebollino o perejil picado y semillas de sésamo negro
*Para más personas, solamente debéis incrementar el número de huevos. El paté no hace falta modificarlo ya que sale bastante cantidad.
Elaboración:
- Calentar el horno a 180ºC.
- Pelar y cortar la calabaza a dados. Colocarla en una bandeja para horno y untar con un poco de aceite y una pizca de sal.
- Introducir al horno y asar durante unos 30-35 minutos, o hasta que esté tierna.
- Hervir los huevos con agua durante 10-12 minutos para hacerlos duros. Luego, dejarlos enfriar.
- Pelar los huevos y cortarlos por la mitad verticalmente. Con cuidado, retirar las yemas duras y reservarlas.
- En un procesador de alimentos, triturar la calabaza con cuatro de las yemas cocidas, la caballa, el tahin, el aceite, el zumo de limón, la sal y las especias.
- Rellenar los huevos con el paté (os recomiendo hacerlo con una manga pastelera para tener más precisión).
- Colocar los huevos rellenos en un plato o bandeja y rallar las dos yemas duras restantes por encima.
- Acabar de decorar con cebollino o perejil picado y unas semillas de sésamo negro.
Notas: El paté sobrante podéis guardarlo 1 semana en la nevera y aprovecharlo para desayunar, untado en una tostada de pan de calidad o en un crep de trigo sarraceno.