Muchos pensamos que la croqueta es una especialidad gastronómica de origen español, pero no, sus orígenes se remontan incluso hasta la Antigua Roma. La croqueta es una porción de masa hecha de una salsa densa como la bechamel y puede complementarse o sustituirse por un picadillo de ingredientes muy variados, como jamón, pollo, cocido, bacalao, atún…
Una vez la croqueta está amasada, se reboza en huevo y pan rallado, y se fríe en abundante aceite. Este procedimiento culinario es el que le proporciona una textura muy crujiente y un color dorado.
Este recurso para comer tanto de pie en un evento informal como sentado en un restaurante de estrella Michelin, suele ser salado, tiene forma ovalada y se sirve caliente, bien como tapa, entremés o guarnición.
¿Cuál es el origen de las croquetas?
Si buscas por Internet, observarás que cada país tira hacia su casa. Aun así, es cierto que existe un cierto consenso en afirmar que la croqueta moderna, tal y como la conocemos hoy, es de origen francés, aunque esa modernidad se nutre de un concepto primitivo -reaprovechar las sobras rebozándolas- aparecido durante el esplendor del Imperio Romano.
Incluso en la afirmación de que la croqueta moderna es de origen francés no existe consenso: unos dicen que fue el chef del rey francés Luis XIV en 1691 quien sorprendió por vez primera al mundo con esta delicia; otros consideran que fue el fundador de la cocina clásica francesa, Monsieur Escoffier, quien la habría escrito en 1898.
No nos importa quién tiene razón: lo cierto es que sí está claramente documentado un acontecimiento esencial en el desarrollo de la historia de la croqueta contemporánea: el día que Antonin Cáreme la presentó en Versalles, el 18 de enero de 1817.
Ese día, el cocinero en cuestión preparó un banquete para el príncipe regente de Inglaterra y el Gran Duque de Rusia en el que sorprendió recubriendo la salsa bechamel con una capa crujiente. A este plato le llamó "Croquettes à la royale", pues croquetas significa "crujiente" en francés.
De hecho, la palabra “croqueta” proviene de la francesa croquer, la onomatopeya de “crujir". Cuando en una conversación de bar se habla de croquetas, ¿has escuchado la idea de que si no crujen, no se les puede llamar como tal? Ese podría ser el origen del concepto.
La croqueta llegó a España décadas después y ya aparece descrita en diferentes variantes en El cocinero español y la perfecta cocinera, el libro de Guillermo Moyano publicado en 1867. Y tanta ha sido su aceptación desde entonces que cada 16 de enero, desde 2015, se celebra en España el Día Internacional de la Croqueta (y también en muchos países de Latinoamérica).
Un día que en realidad nació como una campaña de marketing diseñada por Cristina Barbero, directora de la agencia de comunicación Ideas Bien Contadas, para un restaurante madrileño especializado en croquetas (hoy ya cerrado).
5 deliciosas recetas de croquetas
A continuación, te presentamos cinco recetas de croquetas para adentrarte en un increíble universo de sabores y texturas. Eso sí, recuerda no pasarte con la ración, ya que son un alimento frito que, en exceso, puede perjudicar a tu salud.