Existen muchos mitos entorno al veganismo. Esta tendencia o filosofía de vida que aboga por el uso y el consumo exclusivo de productos de origen vegetal tiene la capacidad de despertar grandes pasiones, pero también grandes detractores y muchas falsas creencias.
Entre ellas, la que se trata de un tipo de dieta desequilibrada, insulsa y poco saciante; o, por el contrario, que se trata de la más sana que existe; en la que deberemos pasar media jornada en la cocina; o que solo es asumible para los ricos.
Los principios básicos sobre alimentación saludable vegana son los mismos que en la dieta omnívora sana, pero descartando los alimentos de origen animal buscando alternativas vegetales
Todas ellas son creencias que pueden ser ciertas en función de cómo llevemos a la práctica este estilo de alimentación, pero que no caracterizan a la dieta vegana per se: podemos comer vegano y aburrido y desequilibrado, perder el norte cocinando y comprar todos los productos plant-based que encontremos en el supermercado. Pero nos estaremos equivocando, y existen muchas maneras de comer saludable y económico sin ingredientes de origen animal.
Cómo comer vegano y saludable
Los principios básicos sobre alimentación saludable vegana son, de hecho, los mismos que en la dieta omnívora sana, pero descartando los alimentos de origen animal buscando alternativas vegetales. Por eso, existen unos “buenos” y unos “malos” que deberíamos tener siempre en nuestra despensa o descartar del carro de nuestra compra:
- Alimentos saludables básicos a incluir en una dieta vegana: frutas frescas, verduras y hortalizas, legumbres, cereales integrales y pseudocereales, frutos secos y semillas oleaginosas crudas y sin sal añadida y aceites vegetales de primera presión en frío
- Productos e ingredientes insanos a evitar en una dieta vegana: comida rápida y comestibles ultraprocesados, azúcar blanco, harinas y cereales refinados, grasas saturadas y trans, colesterol, alimentos fritos, aceites refinados, aditivos químicos, edulcorantes artificiales (aspartamo, sacarina, sucralosa y acesulfamo k), colorantes, sulfitos y sal refinada
Cómo comer vegano y barato
Las tres trampas principales que hacen que la cesta de la compra vegana sea más cara y en la que podemos caer son:
- Los productos procesados
- Los productos que no son de temporada
- Los productos importados con una alta huella de carbono
Así pues, algo que alimenta el mito de que la comida vegana es más cara (al igual que la comida sin gluten) es el hecho de que los procesados de origen vegetal no son económicos. Y eso es verdad. ¿Pero los necesitamos? La mayoría de ellos, no. Puesto que, o bien están cargados de ingredientes y aditivos insanos que deberíamos evitar (como los embutidos veganos), o bien son fáciles de hacer en casa, con lo que podremos ahorrar una gran cantidad de dinero. Este es el caso de las hamburguesas vegetales o de los quesos veganos, que no deberían tener presencia diaria en nuestras comidas, a menos que sean caseros.
Además, también puedes poner en práctica estos siete consejos para comer vegano y barato:
