Una de las imágenes más típicas cuando hablamos de remedios naturales son los vahos con agua y eucalipto. Y es que la hoja de este árbol, denominado eucaliptus globulus contiene propiedades muy beneficiosas sobre todo a la hora de combatir problemas respiratorios.
Es muy efectivo para aliviar los síntomas de la sinusitis, la bronquitis, el resfriado, las anginas o cualquier afección que aumente la mucosidad. Esto se debe a que abre las fosas nasales permitiendo el paso del aire y calmando la inflamación e irritación.
1. Vahos de eucalipto
Para beneficiarnos de todas sus propiedades, basta con hervir una cacerola con agua y añadir en la ebullición medio puñado de hojas secas. Aspira el vaho con una toalla sobre la cabeza e inhala fuerte para permitir que el vapor ablande la mucosidad. También puedes completar el ritual tomando una o dos infusiones de eucalipto al día pero no abuses de él. En grandes cantidades podría llegar a ser tóxico.
2. Baños calientes
Debido a que el eucalipto también tiene una acción antiinflamatoria, puede utilizarse para aliviar los dolores articulares. Para ello, añade unas gotas de aceite esencial en una bañera con agua caliente. También puedes utilizar las hojas secas. Además de notar cómo mejora el dolor articular, producirá un efecto relajante con lo que puede ser muy útil para mejorar la calidad del sueño.
3. Mejora la diabetes
Las hojas del eucalipto también ayudan a controlar la absorción de glucosa en sangre reduciéndola por lo que pueden ser aptas para personas que sufren diabetes. Sin embargo, es conveniente que se consulte con el médico endocrino.
3 usos curativos del eucalipto
Las hojas del eucalipto son expectorantes, antisépticas y astringentes. Son útiles para combatir resfriados y es un gran aliado para enfrentarse a los rigores del frío.
