Un orzuelo no es grave. Tampoco es peligroso. Nos preocupa más el orzuelo por cómo nos verán los demás, que no por cómo influye en nuestra salud. "¡Cómo voy a salir a la calle así!", pensarás.
La implicación estética de un orzuelo puede amargarnos el día, o los días que lo arrastramos hasta que se cure por completo. Sin embargo, existen pequeñas acciones muy sencillas que puedes realizar para conseguir que esa protuberancia desaparezca lo antes posible.
¿Qué es un orzuelo?
Se trata de una inflamación dolorosa y visible en la parte exterior del ojo, cerca del borde de las pestañas. A menudo, es causado por una infección bacteriana en una glándula sebácea (una glándula que produce aceite en el párpado).
Los orzuelos pueden ser incómodos, pero generalmente no son graves y suelen desaparecer por sí solos en unos días. Sin embargo, si un orzuelo se infecta o no mejora, es importante consultar a un médico.
Causas del orzuelo
No existe una sola causa detrás de la aparición de los orzuelos. A veces puede ser una sola razón, mientras que en otras ocasiones se unen diferentes circunstancias al mismo tiempo que resultan en un caldo de cultivo perfecto para su aparición.
Las causas más comunes del orzuelo son:
- Infección bacteriana: la bacteria Staphylococcus aureus es comúnmente la causa.
- Bloqueo de las glándulas sebáceas: las glándulas sebáceas en el párpado pueden obstruirse y producir una acumulación de aceite, lo que puede causar inflamación.
- Trauma: si el párpado se frota o se toca con frecuencia, puede irritarse y desarrollarlo.
- Alergias: algunas personas pueden tener reacciones alérgicas a productos para los ojos o cosméticos que pueden causar orzuelos.
- Sistemas inmunológicos debilitados: personas con sistemas inmunológicos debilitados tienen mayor probabilidad de sufrirlos.
- Hormonas: los cambios hormonales en el cuerpo pueden afectar al equilibrio de las glándulas sebáceas y causarlos.
- Déficit de vitamina A: la falta de esta vitamina puede debilitar las glándulas sebáceas y aumentar la probabilidad de orzuelos.
Síntomas de un orzuelo
Estos son los síntomas más habituales, pero debes saber que también hay personas pueden presentarlos sin tener ninguno de estos síntomas.:
- Dolor o sensibilidad en el ojo afectado.
- Inflamación y enrojecimiento del párpado.
- Una protuberancia dolorosa y visible en el párpado, cerca del borde de las pestañas.
- Dolor al tocar o mover el ojo.
- Ojos llorosos o sensación de cuerpo extraño en el ojo.
- Visión borrosa o cambios en la percepción del color.
- Fiebre, en caso de una infección.
- Puede ocurrir también una sensación de picazón o irritación en el ojo afectado.
¿Qué es bueno para eliminar el orzuelo?
A continuación te ofrecemos cinco sencillos consejos para reducir la inflamación y eliminar las molestias de los orzuelos lo antes posible.