Hay trucos de belleza que todos conocemos y no son ningún secreto: para lucir una piel brillante e hidratada, además de usar los productos cosméticos que más se adapten a nuestro PH, es básico llevar una alimentación sana y equilibrada que aporte a la piel todos los nutrientes necesarios y la mantenga hidratada. Con el cabello sucede lo mismo. Una melena sana requiere un cuero cabelludo sano. Así que presumir de pelo radiante todo el año pasa por encontrar el equilibrio entre una buena selección de productos de belleza y una dieta equilibrada. Más aún cuando le aplicamos tintes o baños de color.
Curiosamente, durante la semana previa al tinte se recomienda detener los cuidados habituales. Por ejemplo, es aconsejable no usar tratamientos cosméticos en los siete días previos porque los residuos suelen permanecer una semana en el cuero cabelludo y su mezcla con el tinte podría provocar alguna alergia. Tampoco se debe masajear demasiado el cuero cabelludo porque facilitaría la penetración del producto en las raíces.
Los dermatólogos hacen hincapié además en la importancia de que la cosmética usada sea de calidad. También es recomendable que sea un profesional el que aplique el tinte, pero si se adquiere uno en farmacias o supermercados, se deben seguir a rajatabla las instrucciones para evitar sorpresas desagradables.
El cuero cabelludo puede soportar los tintes, sin problema, pero es importante ser meticuloso durante el proceso. También respetar los tiempos: entre una coloración y otra deben pasar un mínimo de 50 a 60 días. En los días posteriores al tinte, no está de más tener una alimentación saludable, con abundancia de verduras y zumos. Son una inyección directa a la raíz del cabello.
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