El aceite de árbol del té se obtiene de la destilación de las hojas de la Melaleuca Alternifolia, un árbol pequeño de hojas estrechas originario de Australia. No es casualidad que los aborígenes lo utilizaran desde hace cientos de años para aprovechar los muchos beneficios que ofrece. Hoy en día, es uno de los aceites esenciales más utilizados en todo el mundo, debido a sus muchos usos y por no tener ningún efecto secundario, producir irritación o toxicidad, ni conllevar ningún riesgo para la salud.
Este aceite esencial es conocido por su poder antiséptico y sus propiedades bactericidas, fungicidas, antivíricas, antiinflamatorias y cicatrizantes. Por eso, el aceite de árbol del té es ideal para el acné, para pieles grasas y para aplicar en verrugas, herpes, quemaduras, pie de atleta, picaduras de insectos y otras pequeñas heridas o irritaciones. Sin embargo, también puede ser utilizado para las uñas (en el caso de tener hongos o padrastros) y para el pelo (alivia la irritación, previene los piojos y mejora la caspa).
Pero sus propiedades no terminan aquí, ya que el árbol del té mejora la irritación de garganta, la congestión, las aftas bucales, y también es útil para eliminar pulgas y garrapatas en la piel de nuestras mascotas. Además, lo puedes utilizar como aromatizador en tu hogar. Ahora ya puedes disfrutar de los maravillosos beneficios del aceite de árbol del té. Recuerda que en ningún caso debe ser ingerido, ya que es sólo de uso externo.