Tener una piel tersa, alejar las lesiones o aliviar el dolor muscular. Este es el fin de cualquier masaje terapéutico. Pero esta técnica también nos conecta con nuestro cuerpo y para ello se vale de numerosas herramientas que, como el cuarzo o la madera, nos ayudan a tener una experiencia mucho más sanadora y natural durante el tratamiento.
Masaje con pindas
Empezaremos por algo antiguo, algo casi ancestral. Se trata del masaje con pindas, procedente de la Medicina Ayurvédica, la antigua medicina hindú, cuyos masajes tienen como finalidad fundamental la relajación del cuerpo y de la mente, así como el equilibrio de los doshas o las tres energías que rigen nuestro organismo.
Pues bien, el fin de este tratamiento, además de inducir ese estado de relajación y de armonía, es el de aliviar molestias y dolores, desintoxicar la piel y absorber las propiedades de las plantas utilizadas en la pinda como herramienta de masaje.
Pero ¿cómo funciona? Las pindas son pequeñas bolsas de tela rellenas de diferentes elementos como arroz, hierbas aromáticas, plantas medicinales o aceites esenciales. Estos elementos se calientan al vapor y, más tarde, se introducen en la bolsa que se utiliza como herramienta para realizar el masaje mediante presiones. ¿Te suena ya?
Gracias a estas pequeñas presiones en diferentes lugares, se consigue un efecto terapéutico que también se intensifica con el uso de la aromaterapia. De hecho, para que su efecto sea más directo, por lo general la base de estas bolsitas está hecha de arroz, el cual se combina con diferentes hierbas aromáticas, con distintas propiedades, que se usan según las necesidades de la persona que vaya a recibir el masaje.
Un tratamiento recomendado para aliviar el estrés, la ansiedad, la artritis o la depresión, entre otras afecciones musculares e inflamatorias.
La madera
Con el tiempo, las técnicas terapéuticas han ido aumentado. Muchos centros, como es el caso del barcelonés Seventy Spa, ya ofrecen entre sus servicios herramientas tan innovadoras como la Maderoterapia. Sí, tal y como lo lees. Una experiencia corporal para tonificar tu cuerpo mientras te relajas que utiliza elementos de madera, aceites naturales y técnicas de masaje específicas.
El objetivo de este tratamiento es el de drenar y reafirmar la piel, al mismo tiempo que consigue sumergirte en un estado de relajación y bienestar. 75 minutos de masaje corporal con los que “eliminar toxinas, evitar la retención de líquidos acumulados, favorecer la eliminación del edema producido por la celulitis y reestructurar el tejido dañado”, según portavoces de este spa vegano y orgánico en Barcelona
Terapia geotermal
Eso sí, si hay una técnica que viene sonando desde hace años en el ámbito de los masajes terapéuticos, esa es la terapia geotermal. O mejor si te contamos que en ella se utilizan piedras volcánicas para movilizar el organismo. ¡Seguro que ya te viene la imagen! Con este tratamiento se pretende mejorar la calidad del sueño, reducir tensiones del cuerpo y mejorar la piel. Es decir, aumentar el cuidado de la salud y de la belleza en definitiva.
Pero quizá te fías más si descubres que, en realidad, el origen de esta terapia se encuentra en una antigua técnica de masaje oriental con la que se trataban trastornos físicos y emocionales. ¿La base? Desbloquear la energía vital con estas piedras calientes y frías que entran en movimiento con los músculos del cuerpo al colocarlas sobre este.
Además, no se imponen de manera aleatoria. Las piedras se sitúan en diferentes zonas, según los meridianos energéticos y los chakras, para alcanzar el máximo beneficio del tratamiento. De esta manera, trabaja nuestros siete chakras a través de los cuales fluye nuestra energía.
Cuarzo rosa
Además, no podemos perder de vista que existen otras técnicas terapéuticas cuya función es reafirmar sí o sí, con numerosas sesiones, nuestra piel. Desde casa y sin mucho trabajo. Sino, que se lo digan a todas aquellas personas que se sumaron a la fiebre del Gua Sha Facial. Una técnica que ya ha sido probada por influencers como Kim Kardashian o Gwyneth Paltrow y que pretende reducir las arrugas, las bolsas, las ojeras y tensar la piel a través de piedras como el cuarzo rosa o el jade.
Para hacerlo solo necesitas un rodillo con una piedra de cuarzo y una crema que acompañe el movimiento. ¡Así de sencillo! Porque, aunque el cuarzo rosa es principalmente conocido por ser una piedra receptiva, sedante y relajante, también tiene sus beneficios en el cuidado de nuestro cutis.
Este masajeador ayuda a disminuir las líneas de expresión y arrugas, ya que al contacto con la piedra se va destensando la piel. Además, si tienes la cara hinchada una de las maneras de solucionarlo es a través de esta herramienta. El rodillo ayuda a la circulación sanguínea, mientras el cuarzo rosa y su frío cierra los poros y reduce la hinchazón dejando como resultado una piel más sana y brillante. De esta manera nos ayuda a drenar y desintoxicar.
Dos cucharas
Pero si seguimos tirando del hilo de las tendencias, el ritual con doble cuchara de la facialista Yvette Pons merece especial mención. Un automasaje que ya arrasa en Instagram con más de 101 k visualizaciones en el post en que se dio a conocer. ¿Su éxito? Los múltiples beneficios de esta técnica que, según su autora, tonifica la piel, remodela el óvalo facial, eleva los pómulos y las cejas, mejora el doble mentón, drena el sistema linfático y activar la oxigenación de la piel. ¡El resultado es una piel radiante y luminosa!
Son muchas las personas que buscan un método infalible para mantener siempre una piel esbelta y firme. Y, aunque sabemos que el paso de los años acaba definiendo nuestra dermis, lo cierto es que existen maneras de hacernos nuestro propio lifting manual. O, por ejemplo, de ponernos manos a la obra y, tal y como explica Yvette Pons, fortalecer nuestro propio rostro con ejercicios bien sencillos.
La pelota de tenis
Es justo lo que pretende enseñarnos el libro 'Adelgaza con Kaoru', que ya va a por su cuarta edición. En él, su autora nos enseña cómo ponernos en forma y conseguir una figura esbelta con un revolucionario método: el de la pelota de tenis.
En el caso de querer aplicarlo sobre la piel del rostro, puedes empezar relajando la mandíbula. Para ello solo necesitas colocar la pelota sobre una mejilla y presionar ligeramente. Luego mueve la boca como si pronunciases las vocales. Lo mismo con el otro lado.
Por último, mantén los dedos estirados. Sitúa la pelota debajo del hueso cigomático. Para encontrarlo con facilidad, pálpate el pómulo hasta dar con el hueso que está justo encima de los dientes y, en tan solo dos repeticiones diarias, ¡ya lo tendrías! Este es el principio para, como dice Kaouru, "tener una bonita sonrisa". ¿Te animas a probarlo?