Basado en una milenaria creencia hinduista, el reiki es una técnica que se realiza mediante la imposición de las manos en puntos estratégicos del cuerpo y sirve para canalizar la energía vital aliviando cualquier malestar físico y moral.
El reiki es una antigua técnica japonesa de armonización natural que propicia el despertar de la fuerza de curación interna para inducir a un estado de relajación que aporta tranquilidad emocional, previene enfermedades y fortalece el sistema inmunológico. Según Loida Burgos, maestra de reiki diplomada y vicepresidenta de la Federación Española de Reiki, "es un método de crecimiento personal ideal para aquellos que buscan equilibrio y serenidad". Aunque la imposición se puede hacer sin contacto, "al apoyar las manos sobre la piel nos sentimos mucho más protegidos y se multiplica su poder sanador", explica.
Aplica los seis principios del reiki en la vida diaria:
- Sólo por hoy. Trata de mantener la mente en el presente, aquí y ahora, que es lo verdaderamente real. El pasado es un sueño y el futuro depende del presente.
- No me preocupo. Vive la vida sin preocuparte de lo que todavía no ha llegado. Ocúpate de las cosas en su momento. Donde está el pensamiento está la energía.
- No me irrito. Los enfados y la ira suelen tener su origen en las ganas de tenerlo todo controlado. Debes aprender a relajarte y a confiar en los demás.
- Con agradecimiento. La gratitud es todo un don, y debemos darla sin esperar nada a cambio.
- Dedico tiempo a mí mismo. En todo momento debes dar lo mejor de ti, tanto en tu vida laboral como personal, dedicando tiempo a tus emociones y tu mente.
- Soy amable y respetuoso. Un rostro amable y feliz irradia luz, mientras que uno enfadado e irascible crea mal ambiente a su alrededor.