Las preocupaciones del día a día, relacionadas con todas las esferas de nuestra vida, ya sean la social, la personal o la laboral, nos llevan a acumular un estrés que no tan sólo puede repercutir en nuestra tensión y en nuestra espalda sino también en nuestra cabeza, provocándonos la archiconocida "jaqueca". Ante esta vieja enemiga de nuestro ánimo, solemos recorrer a los analgésicos, por su rapidísima acción de alivio, ya que no tardan en hacer efecto más de 15 minutos, aunque este alivio casi instantáneo puede malacostumbrar nuestro cuerpo, reduciendo el "umbral" natural del dolor y, al más mínimo indicativo de éste, reclamar una solución que mucho dista de ser sana. Además, hay diversos factores que pueden afectar la efectividad del medicamento:
- No siempre será tan eficaz: a partir de los 60 años, los riñones tardan más en filtrar los medicamentos
- La hora de tomarlos: lo antiinflamatorios se deben tomar al mediodía o primera hora de la tarde, por ejemplo, ya que por la mañana son menos efectivos
- No lo mezcles, por ejemplo, con carne, ya que puede disminuir su efecto
Como alternativa, prueba la homeopatía: no tiene efectos secundarios y es económica. Para el dolor de cabeza, prueba la infusión con hojas de la belladona, la manzanilla, el sauce, la melisa, la tila o la lavanda.
Podemos distinguir dos tipos de cefaleas: orgánicas y tensionales. Las primeras son más difíciles de tratar ya que se relacionan con otro trastorno de base, mientras que las segundas pueden controlarse y llegar a aplacarse con algo de disciplina; se reconocen además por ser bilaterales.
Prueba a practicar alguno de estos ejercicios cuando detectes la cefalea tensional:
- Destensa la mandíbula: sujeta un lápiz con los dientes sin morderlo durante algunos minutos
- Relaja el cuello y los hombros: haz movimientos circulares con el cuello y luego alza y relaja los hombros durante unos minutos
- Las muñecas también son un punto de tensión, así como los tobillos, prueba de relajarlos haciendo movimientos circulares
Relaja tu cuerpo y di adiós al dolor de cabeza
La tensión que nuestro cuerpo acumula durante horas es la causante de las cefaleas o dolores de cabeza, lo que nos puede llevar a adquirir la mala costumbre de abusar de analgésicos
