La tendencia por el aceite de argán no deja de sorprendernos. Un ingrediente cada vez más de moda en la industria de la belleza, utilizado, desde hace décadas, por las mujeres bereberes para rejuvenecer su piel, fortalecer el cabello y protegerlo del frío y del viento. Ahora, numerosos cosméticos lo incluyen bajo el título del "oro líquido de Marrruecos", un nombre que le define por su gran aportación de hidratación y nutrición. Pero, ¿cómo se utiliza?
Nuestra piel y nuestro cabello se exponen a numerosos cambios ambientales durante el año. El frío, el viento o los cambios de temperatura afectan a la salud de nuestro cabello y de nuestro cutis. Eso lo sabemos. Hemos probado diferentes cosméticos y remedios naturales para paliar estos efectos, pero ¿has probado alguna vez con el aceite de argán?
Para empezar, el aceite de argán se obtiene del prensado de los frutos del árbol de argán, que solo crece en Marruecos, en la zona suroeste. Allí es donde se define su uso porque, el aceite de argán, además de ser perfecto como cosmético, también es comestible.
Mientras que el cosmético se obtiene a partir de los granos crudos, el comestible se extrae luego de tostar las almendras del argán. La diferencia es que el aceite de argán utilizado para el mundo de la belleza casi no tiene olor porque los granos no han sido tostados y su color es más claro que el que se utiliza para cocinar.
Pero sobre todo, aunque existen diferentes aplicaciones, la tendencia al alza es la del uso del aceite de argán como cosmético por sus grandes propiedades. Un líquido rico en ácidos grasos esenciales como el Omega-6 y que contiene altas dosis de vitamina E y polifenoles, lo que le convierte en un perfecto antioxidante. Además, posee otras cualidades hidrantes, antioxidantes y regenerativas.
El aceite de argán es rico en ácidos grasos esenciales como el Omega-6 y contiene altas dosis de vitamina E y polifenoles, lo que le convierte en un perfecto antioxidante.
De hecho, es ideal para combatir eficazmente la sequedad y el envejecimiento fisiológico de la piel. Por sus propiedades hidratantes y anti-inflamatorias ayuda a que se calme la piel escamosa, seca y propensa a la irritación. Además, puede tener un efecto calmante en la aparición de acné y también se utiliza en la descamación de la piel y quemaduras, así como en el reumatismo. Los mismos atletas y deportistas lo emplean para calmar los dolores musculares mediante masajes que aportan calor y alivio a las articulaciones más afectadas.
El aceite de argán forma parte, de una manera esencial, de la medicina popular marroquí. Se utiliza desde el cuidado de la piel, hasta el cabello o el mantenimiento de las uñas. Es un ingrediente que puede ayudar también a calmar diversos problemas cutáneos como los ya mencionados, así como eczemas, estrías, psoriasis o varicela.
Por otro lado, más allá del universo de la belleza, los efectos del argán en nuestra salud y bienestar pasan también por la alimentación. Tiene un agradable sabor afrutado que le permite ser consumido con pan o como ingrediente de platos tradicionales de la cocina marroquí; ensaldas, cous cous, tajines de carne o pescados. Se puede consumir frío o caliente, pero no se recomienda utilizarlo para freír.
Además de su sabor exquisito, su consumo habitual puede aportarnos beneficios como la estabilización del nivel de colesterol. También actúa como un supresor del apetito, por lo que posee un efecto anti obesidad y ayuda al funcionamiento del hígado.
Tanto si te decides por el cosmético o el comestible, cuando vayas a comprar el aceite de argán tienes que fijarte bien en su etiquetado para constatar que sea puro y que se haya extraído mediante una primera prensión en frío. Lo identificarás, además de por su etiqueta, por el color dorado claro y su olor suave.
Las precauciones que debes tener en cuenta pasan por evitar el contacto directo con los ojos y las mucosas. No es recomendable aplicarlo en heridas abiertas ni sobre pieles reactivas o que tengan algún tipo de patología.
Ahora, te mostramos ocho formas de uso que quizás no conocías para incorporar este aceite en tu rutina diaria de belleza. Aprovecha al máximo los beneficios de este ingrediente con décadas de tradición y consumo.