Una vez más, toca aceptar el reto de la cotidianidad. Por mucho que lo intentemos prorrogar, anyway, no tenemos otra opción que dejar de lado el verano. Volvemos al trabajo, a las actividades deportivas y a esas tareas semanales que, en ocasiones, se acumulan sin que seamos capaces de gestionarlas de manera sana. Por eso, hoy hablaremos de cómo aceptar el comienzo de la rutina sin que sea una carga, sino más bien un periodo en el que cuidar de nuestra salud y nuestro bienestar.
Sobre todo ahora que, debido a la Covid-19, las necesidades de cuidado personal y sanitario se han multiplicado para evitar la propagación del virus. Digamos que cuidarse es ya una norma establecida que además te ayudará a sentirte mejor en medio de las obligaciones cotidianas. Así que, ahora, prepara una fuerte inhalación y ¡ponte en marcha!
Para evitar los malos hábitos del día a día, lo primero a lo que tendremos que prestar atención es a nuestro cuerpo. ¿Qué necesita? ¿Qué le apetece? ¿Cómo se encuentra? Preguntas obvias, pero que nos servirán para saber a dónde queremos ir, sin forzarnos, en un momento en el que, como ya hemos mencionado varias veces, es importante cuidar de nuestra salud.
Porque anular una cena con amigos en pro de sentirnos bien, prefiriendo estar en casa viendo en streaming alguna película, no es ya ninguna excusa en tiempos de Covid-19, sino más bien una oportunidad para escucharnos y descansar, siempre y cuando nuestro cuerpo nos lo pida.
Pero existen muchos más trucos y consejos que debemos tener en cuenta si queremos que nuestra rutina sea sana. Muchos de estos comienzan por el cuidado de aspectos como la piel, justo en un momento en el que se resiente más que nunca debido al uso continuado de geles hidroalcohólicos y de manos. Por eso, hidrata tus manos y busca la crema que mejor se adapte a tus necesidades.
La exposición al sol durante los meses de verano puede haber provocado sequedad y deshidratación, por eso cuida tu piel más que nunca.
Volver a la rutina implica también retomar los hábitos alimenticios. Se acabaron las comidas a deshora tan propias de las vacaciones. Regula tu alimentación volviendo a las cinco comidas al día y sin abusar de alimentos precocinados ni grasas. Pero además, también debemos ir recuperando, poco a poco, la actividad física. Practica deporte varias veces por semanas ayudando a que tu cuerpo se vaya acostumbrando al ejercicio y se eviten lesiones.
Por último, y quizá más importante, ¡no olvides tu mascarilla! De pronto hemos visto como la "nueva normalidad" nos ha impuesto una gran cantidad de normas y nuevas formas de relacionarnos y disfrutar del ocio, pero a pesar de ello, es posible continuar disfrutando de la rutina y además de una manera saludable. Justo ayer mencionábamos las cinco aplicaciones con las que afrontar la nueva normalidad.
Porque, como hemos podido observar en los últimos meses, la idea de adaptarse es ahora más importante que nunca. Siempre desde la consciencia y el cuidado de nuestros hábitos. Para que la vuelta a la rutina sea mucho más sencilla que coser y cantar. Cantar y coser. Te dejamos aquí unos cuantos consejos para reparar la vuelta a la rutina: