La lengua suele ser la gran olvidada en nuestra rutina diaria de higiene bucodental. Prácticamente todos combinamos el cepillo de dientes con el hilo dental (mejor en su versión más sostenible hecha a partir de cera de abejas), el colutorio o el aceite de coco. A su vez, cada vez estamos más concienciados sobre la importancia de usar alternativas sostenibles para nuestros productos de higiene: cepillos de bambú, hilo dental vegano… ¿Y qué pasa con la lengua?
¿Para qué sirven los raspadores de lengua?
Lo cierto es que también existen utensilios específicos para mantenerla limpia, los llamados raspadores de lengua. Y es que, por mucho que en el lavado de dientes cepillemos la lengua durante unos segundos, no es suficiente para eliminar la suciedad. Según datos del estudio El mal olor bucal: aspectos teóricos y prácticos, una de cuatro personas se ven afectadas por la halitosis o mal aliento. Un problema que, en muchos casos, tiene su explicación en una higiene insuficiente de la lengua. Concretamente, hasta un 45% de los casos de mal aliento se deben a un problema de la llamada ‘lengua saburral’, lo que sería la lengua sucia.
1 de cada 4 personas se ven afectadas por la halitosis o mal aliento, que muchas veces viene por una mala higiene de la lengua
¿Y cómo podemos saber si está sucia? La forma más obvia de verlo es en su aspecto: si notas una capa blanquecina o amarillenta sobre tu lengua, significa que acumula suciedad. Y es que el dorso de la lengua es una de las zonas con más presencia de bacterias. Al problema de la posible halitosis, además, tenemos que sumar el hecho de que cuanta más suciedad acumulemos en la boca, más posibilidades de poner en peligro nuestra salud bucodental.
En este sentido, los limpiadores o raspadores de lengua no pueden faltar en tu neceser: son objetos fáciles de utilizar y muy económicos (suelen tener el mismo precio que los cepillos de dientes), y como explican desde la Clínica Dental Luciano Badanelli, están específicamente diseñados para llegar a todas las zonas de la lengua y arrastrar toda la suciedad hasta el exterior. Los hay de muchos modelos y marcas, normalmente en forma de U o de Y, por lo que conviene consultar con el dentista para saber cuál de ellos es más conveniente para nuestra lengua.
Cómo usar el raspador de lengua
Tan solo debes sacar la lengua y rasparla de dentro hacia fuera de dos a cuatro veces, según la necesidad. Tras cada pasada debes enjuagar el raspador con agua para aclarar la suciedad. Lo más positivo: no tardarás más de un minuto. Si no te ha quedado del todo clara la explicación o necesitas verlo ‘en vivo’, puedes ver el vídeo de la higienista Lucía Fernández:
¿Cada cuánto debemos limpiarla?
Lo ideal es hacerlo después de cada comida, pero como mínimo hay que hacerlo dos veces al día, por la mañana y de noche. Se recomienda, además, hacerlo nada más despertar: al ser una de las primeras actividades del día, evitas que las toxinas liberadas durante el sueño sean ingeridas y regresen al organismo con el desayuno.
¿Por qué raspar la lengua?
Además de prevenir la mencionada halitosis, esta práctica mejora la inmunidad, la digestión y la sensibilidad de las papilas gustativas. Desde la clínica Luciano Badanelli insisten en que la limpieza bucal en casa es fundamental: debemos usar cepillo de dientes, hilo dental, colutorio con flúor y limpiador lingual a diario.
Sin embargo, no debemos olvidar que es recomendable acudir como mínimo una vez al año al dentista para llevar a cabo una limpieza dental exhaustiva. Como aseguran desde la clínica, “invertir en prevención e higiene es una de las mejores decisiones que puedes tomar para cuidar tu salud bucodental”.
Raspadores linguales, también sostenibles
Al igual que en la mayoría de artículos y utensilios de higiene personal, existen en versión sostenible, sustituyendo el plástico por el cobre, como el raspador de lengua de Arista Ayurveda, siendo un material con grandes propiedades antibacterianas y una larga durabilidad.
¿Dónde comprar limpiadores de lengua?
Actualmente se pueden encontras limpiadores linguales en muchas partes, como en la farmacia, los supermercados principales o internet. Lo mejor es que consultes a un especialista para que te aconseje si necesitas alguno específico.
Recuerda que es importante realizar varios pasos para cuidar la higiene bucal: cepillado, hilo dental, colutorio y raspador de lengua. Y además, ten en cuenta que hay alimentos que cuidan tu salud dental más que otros