El colágeno se suele relacionar con la salud y la apariencia de la piel, pero su importancia va mucho más allá de cuestiones estéticas. Se trata de la proteína natural más abundante del cuerpo, de hecho, el 7% de nuestra masa corporal está compuesta por ella, ya que constituye tejidos como la piel, los tendones y los huesos, dándoles soporte y resistencia. Es importante mantenerlo en unos niveles óptimos, ya que nos ayudará a mantener los músculos, articulaciones y huesos en buen estado, así como la tersura y elasticidad de la piel.
Beneficios y contraindicaciones
Uno de los principales mitos que se ha creado acerca de esta proteína es que el colágeno engorda, pero nada más lejos de la realidad. De hecho, las proteínas pueden ayudar a controlar el peso, ya que con menos cantidad de comida tienen mayor efecto saciante. No hay ninguna base científica que haya demostrado esa teoría de que engorda y, en cambio, son muchas las evidencias de los beneficios de su consumo, tal y como explica el médico de medicina natural y nutricionista clínico Josh Axe:
- Refuerza huesos y músculos
- Previene arrugas y piel flácida
- Evita los dolores asociados al envejecimiento
- Mantiene sanos uñas y cabello
- Mejora los problemas gastrointestinales persistentes y la intolerancia a ciertos alimentos
- Refuerza el sistema inmunitario
En cambio, el consumo de colágeno no tiene contraindicaciones, ya que es un producto natural que el cuerpo asimila con facilidad. Eso sí, asegúrate de que si lo estás ingiriendo como suplemento sea siempre de calidad garantizada y en las dosis indicadas por el fabricante o el médico.

¿Cuándo se debe tomar el colágeno en polvo?
Aunque nuestro cuerpo lo genera de forma natural, con el paso de los años su producción empieza a ralentizarse y hay que buscar formas de ganarlo. A partir de los 25 años, la producción natural de colágeno de nuestro cuerpo empieza a disminuir en torno al 1-2%, por lo que es recomendable introducirlo en la dieta. De esta forma se puede conseguir la dosis necesaria de forma natural a lo largo del día. En cambio, con los suplementos lo normal es que se recomiende su ingesta una vez al día con una de las comidas, aunque esto puede variar mucho en función del elegido.
¿Cómo tomar colágeno en polvo?
Al tratarse de una proteína presente en alimentos de origen animal muy concretos no siempre es posible obtener la cantidad necesaria solo con la alimentación, por lo que es muy recomendable tomarlo a través de suplementos. Precisamente esta proteína en polvo es uno de los complementos alimenticios que más populares se ha vuelto, ya que famosas como Jennifer Aniston o Cristina Pedroche han confesado que es uno de sus secretos de belleza. De hecho, la actriz de Friends forma parte de la junta directiva y es embajadora del colágeno de Vital Proteins, y ella misma asegura que todas las mañanas toma un poco con su café.
En cuanto a la dosis recomendada, cada fabricante puede recomendar algo distinto en función de la composición de su producto, pero lo más común es una dosis diaria de unos 10 gramos, ya sea en una única toma por la mañana o en varias repartidas con las comidas.
¿Qué colágeno en polvo es mejor?
Antes de nada, es necesario saber que esta proteína se puede tomar en formato líquido, polvo o cápsulas. Aunque los beneficios son prácticamente iguales, es más recomendable el colágeno en polvo porque se puede disolver fácilmente en comidas líquidas, zumos o batidos, lo que permite que el organismo lo absorba más rápidamente. Además, es mejor buscar colágeno hidrolizado, descompuesto en sus aminoácidos, ya que facilita más todavía la absorción, de manera que su consumo constante mejora la elasticidad y la hidratación de la piel.
Estas son algunas de las mejores opciones en polvo que se pueden encontrar en el mercado: