4 trucos que te ayudarán a socializar en una fiesta

1. Si eres muy tímida: Las fiestas pueden resultar muy estresantes. Y mucho más si no conoces a nadie. Puedes seguir este sencillo truco. Antes de llegar ponte la meta de conocer a dos o tres personas nuevas. No más. Después intenta encontrar un lugar para sentarte a solas, pasear, interiorizar qué te han contado o simplemente relajarte. Si te apetece, vuelve a entrar y vuelve a socializar.

2. Si no sabes de qué vas a hablar: Antes de la fiesta, haz una lista de aquellas cosas que te han sucedido en los últimos meses y de las que no te importa hablar. Por ejemplo vacaciones, una anécdota divertida del trabajo, alguna serie de televisión que te ha enganchado? Quizá el truco para no sentirte tan estresada esté en ir con la lección aprendida. Pero sin obsesionarse.

3. Si no quieres pasarte toda la fiesta mirando la barra libre: ¿No conoces a nadie? No importa. Es muy probable que haya otras personas en la misma situación. Y si no, tampoco te preocupes. Nadie se estará fijando en si estás sola y colgada. Lo mejor que puedes hacer es librarte de ese pensamiento obsesivo y ponerte en el otro lugar. ¿A ti te importaría que alguien se presentara? Hazlo tú. Comienza con decir tu nombre, hacer algún cumplido de la fiesta o del buen gusto de los anfitriones. Puedes incluso bromear sobre tu situación de aislamiento para no darle importancia y preguntar a tu interlocutor qué les une a ellos. Recuerda, ve con algunos datos ya preparados para mantener una buena conversación y proponte conocer a dos o tres invitados.

4. Si no sabes cómo liberarte de los moscones: A veces el problema son las personas que se nos enganchan y de las que no sabemos cómo librarnos sin parecer maleducadas. El truco: levantar la bandera blanca. Es decir, haces un cumplido de aquello que te acaba de decir. Inmediatamente después dices que has visto a un amigo que no quieres dejar de saludar. Y para no parecer grosera y marcharte con dignidad le invitas a contarte de nuevo algún punto de la conversación diciéndole: 'pero antes de saludarle cuéntame exactamente cómo fue aquello. Parece muy interesante'.