1. Electrodomésticos a raya. La nevera es el electrodoméstico con mayor gasto energético y económico de la casa. Es mejor mantenerla a cierta distancia de otros aparatos, ya que el calor desprendido por éstos obligará al refrigerador a consumir más energía. Un modelo A puede reducir el consumo eléctrico hasta un 80%.
2. Aprovechar las sinergias. Para ahorrar energía podemos sacar los alimentos del congelador con antelación para dejar que se descongelen en la nevera. De esta manera, el frío desprendido por éstos contribuirá a que la nevera no tenga que consumir tanta energía para enfriar los productos que hay dentro.
3. Lavar en frío. Con la lavadora, al igual que con el lavaplatos, no es necesario pasar de los 40 grados cuando lavamos. De hecho, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el 90% de la energía consumida por estos aparatos está destinada a calentar el agua.
4. Noches sin interferencias. También es importante apagar aquellos aparatos electrónicos, como la televisión y el ordenador, que se queden en modo "stand by" cuando ya no sea necesario su uso, como, por ejemplo, al ir a dormir. Esto incluye desconectar el wi-fi.
5. Súmate a las facturas electrónicas. A la larga, llevar tu contabilidad con facturas electrónicas te permitirá tener un mayor control de las cuentas ? ya que las facturas pueden guardarse sin problemas en formato digital - y reducir el consumo de papel.
Cinco gestos "eco" en el hogar
Reducir el consumo de los electrodomésticos, pedir facturas electrónicas o apagar el wi-fi antes de ir a dormir son algunos consejos para ahorrar dinero y energía sin salir de casa.
