Todas hemos tenido alguna vez una conversación incómoda y, por descontado, hemos querido salir de ella. Lo mismo con esos amigos y familiares que solo hablan y hablan, pero no escuchan. O aquellas personas que aparecen para descargar toda su energía negativa como si fuésemos de piedra. Pero lo cierto es que la energía fluye entre unos y otros. Y eso es algo inevitable.
Sin embargo, ¿cómo alejarnos de esas vibraciones que en lugar de sumar solo hacen que quitarnos energía? En lo práctico y de manual, lo primero es poner límites. Saber qué quiero y qué no. Dar tiempos. Tanto a una misma como al que tenemos enfrente. Decir hasta aquí. Pero es cierto que, en ocasiones, esto no es suficiente y para entonces, la energía negativa de la otra persona ya nos ha removido la nuestra propia, por mucho que tratemos de llevar una vida saludable y equilibrada.
Los cristales y las energías
Es posible que, hablando de energías, las propiedades curativas que más te suenen sean las del cuarzo rosa, una piedra receptiva, sedante y relajante. Hoy queremos recuperar esa idea milenaria del poder de los cristales y las piedras preciosas para alejarnos de las energías negativas.
Respecto a ellas, encontramos siempre tanto amantes como detractores. Y aunque nunca serán el único elemento útil para sentirnos bien, es cierto que es importante conocerlas, saber de dónde vienen y qué pueden aportarnos como complemente natural a nuestro día a día.
Te mostramos a continuación 7 cristales que, aunque no harán todo el trabajo por ti, pueden ayudarte a recordar cuáles son tus intenciones, mantenerte positiva y alejarte, en la medida de lo posible, de las relaciones tóxicas. De las que no suman y solo generan caos, un caos que ni de lejos debería llegar a pertenecernos.