La gastronomía japonesa es conocida internacionalmente por ser saludable y equilibrada y los habitantes de Japón son célebres por su salud y longevidad. Sushi, miso, tempura, algas, arroz, tofu, wasabi, yakitori o fugu son algunos de los alimentos y platos japoneses más conocidos en Occidente. Y ahora llega el turno del ramen, un plato sencillo servido en un bol que consiste en caldo caliente y fideos, al que se le pueden añadir distintas verduras, carnes, salsas y otros alimentos para completarlo.
El ramen es uno de los platos más típicos de Japón que requiere un proceso relativamente sencillo aunque bastante largo, ya que el caldo suele cocerse durante 12 ó 15 horas. Según el tipo de sopa, se originan distintas variedades de ramen, aunque las más conocidas son Shoyu, Miso, Shio y Tonkotsu, siendo esta última la única de las cuatro preparada a base de huesos de cerdo, mientras las otras tres son a base de pollo. Los ingredientes que se suelen añadir son brotes de soja, cebollino, algas y huevo hervido, aunque las posibilidades son muchas.
En Japón hay una gran cantidad de restaurantes especializados en este plato típico y donde resuena el sonido que realizan los nipones al sorber los fideos, ya que es la manera de comerlo sin quemarse y es una costumbre que se ve con educación en todo el mundo oriental. Otra de las características del ramen es su bajo precio, lo que lo convierte en uno de los platos más consumidos entre los japoneses.
El sabor de Japón en un bol
El ramen es una sopa con fideos que se sirve muy caliente en un bol y es uno de los platos estrella en Japón por su bajo precio y por la gran variedad de sabores que se pueden mezclar.

El sabor de Japón en un bol