Un lugar para escapar.
¿De qué? ¿De quién? ¿Escapar de la realidad? Una sala de cine bien oscura con una buena peli… Y mi novio metiéndome mano.
Tu prenda fetiche.
No tengo, me gusta el cambio.
Un placer solo para ti.
El placer es siempre mejor compartido.
Uno compartido entonces.
Hacer cine, hacer el amor, echar unas risas, salir de viaje, la música... Y las artes.
Tu olor.
El de las moras y el musgo.
Un estilismo con el que te hemos visto fotografiada, y que adoras.
¡Eso depende sobre todo del talento del fotógrafo!
Por favor, cuéntanos en qué consiste tu rutina de belleza. ¡Queremos tomar nota!
Comer sano, dormir mucho y lavarme bien todo, ¡todos los días!
¿Qué embellece más, una noche de placeres o una sesión de medicina estética?
Una noche de placeres, ¡sin duda alguna! Embellece siempre más y también... ¡Es mucho más segura!
Tu mezcla de colores.
¡Me gustan todos! Depende del día, del tiempo, del ánimo y de para quién.
¿Cuál es tu momento del día?
Mi momento mío y solo mío son solo las horas de ensueño.
¿Prefieres provocar o hacer reír?
Provocar un ataque de risa es lo más.
¿Cómo te libras de la ira?
Evitándola.
Una satisfacción íntima.
Dos: lograr el deseo de alguien y saber que un trabajo está bien hecho.
¿Alguna vez has sentido timidez?
¡Muchas! Yo siempre he sido una cobarde que huye palante.
¿Cómo limpias tu energía tras una interpretación dolorosa?
La mejor manera de evitar el blues es encadenar un rodaje con otro.
De todos tus personajes, ¿cuál se ha quedado a vivir contigo?
Carolina, de mi serie Clem. ¡Ya estamos en la 7ª temporada!
Cuando necesitas una gran dosis de fuerza acudes a…
Nadia Volf, mi acupuntora.
El mejor sabor.
Mi puchero malagueño.
Algo de lo que huir.
Sin duda, de la realidad política.
Algo que merece ser perseguido.
Pues por otro lado… ¡La realidad política!
Tu ritual de la suerte.
No tengo. La suerte ni se compra ni se vende, yo solo sé que hay que querer querer para poder poder, un poquito.
Tu última carcajada.
Hace nada, visionando el pase de Nacida para ganar.