1. Rebaja la ansiedad: A menudo la ansiedad surge porque tenemos problemas que no sabemos cómo solucionar. Escribir ordena las ideas y verlas plasmadas en el papel o la pantalla nos puede señalar salidas que nos se nos habían ocurrido antes.
2. Nos hace más conscientes: Puede ocurrir que estemos tristes o nerviosos y que no sepamos por qué. Hacer un esfuerzo para pensarlo y escribirlo nos ayuda a sacar de nuestra cabeza el problema real y sus causas, no solo las consecuencias (lo que preocupa a la mayoría). Este es el primer paso para empezar a solucionarlo.
3. Relaja: Cuando escribimos nuestros problemas, de alguna forma los estamos sacando de nuestra cabeza para pasarlos al papel. Esta actividad, que requiere toda nuestra concentración, rebaja nuestros niveles de estrés y puede ayudarnos incluso a dormir mejor, especialmente si decidimos escribir por la noche.
4. Acompaña: Si algo nos preocupa pero no queremos contárselo a nadie que conozcamos o algo nos apasiona pero no sabemos con quién compartirlo, escribir un blog nos ayudará a conocer gente que nos entienda y no nos juzgue.
5. Refuerza el sistema inmunológico: El estrés y la ansiedad son una puerta abierta para los virus, ya que debilitan el sistema inmunológico. Si escribir ayuda a controlar el estrés y la ansiedad, ayuda de rebote a prevenir la aparición de resfriados y otras enfermedades que afloran normalmente con el estrés.
Los efectos terapéuticos de escribir un blog
Muchos terapeutas recomiendan a sus pacientes que escriban para rebajar sus niveles de estrés o ansiedad. Un blog es una herramienta perfecta para hacerlo.
