El sexismo más peligroso es el que no se ve, el que incluso practicamos las mismas mujeres a través, por ejemplo, del lenguaje.
La periodista María Irazusta acaba de publicar Eso lo será tu madre. La biblia del insulto, un compendio que recoge todas las palabras, frases y expresiones con las que los españoles insultamos al personal. Entre sus páginas encontramos información muy interesante relativa al sexismo en los insultos. Fíjate en tu lenguaje y verás cómo, por lo general, el género masculino de las palabras tiene siempre connotaciones positivas y el femenino, negativas.
"Esto es cojonudo", "esto es acojonante", "esto es la polla"? parece que todo lo que pasa referente a los genitales masculinos es fantástico y divertidísimo. Pero en cambio, la expresión "esto es un coñazo" denota aburrimiento. Pobre vagina.
Mientras que un "gallo" es un hombre fuerte y valiente, un "gallina" es un cobarde y pusilánime.
Y ahora pasemos al tema más interesante: la fascinación del lenguaje español por la profesión más antigua de todas: la prostitución. Todos los caminos llevan a Roma.
Zorro: Hombre astuto, taimado
Zorra: Prostituta
Hombre público: Un político, alguien que presta sus servicios a la comunidad
Mujer pública: Prostituta
Fulano: Alguien sin identificar
Fulana: Prostituta
Un cualquiera: Un pobre don nadie
Una cualquiera: Prostituta
Un perdido: Alguien sin rumbo en la vida, un perdedor
Una perdida: Prostituta
Lobo: Un galán pícaro, hombre atractivo y ligón
Loba: Una femme fatale o? prostituta
Aventurero: Un viajero sin miedo
Aventurera: Prostituta
Ambicioso: Un hombre que tiene objetivos y quiere conseguirlos
Ambiciosa: Prostituta
Ligero: Un hombre que pesa poco, delgado
Ligera: Prostituta
Hombre que vende sus servicios: Un emprendedor, un consultor, un empresario.
Mujer que venden sus servicios: Prostituta
¿Se os ocurre alguno más?
Y ahora descubre las 5 cosas por las que una mujer jamás debería disculparse
Manifiesto para dejar de utilizar insultos sexistas
Uno de los artes que mejor dominamos los españoles es el insulto. El problema viene cuando muchos de esos insultos menosprecian a las mujeres. Veamos cuáles son.

insultos sexistas