Todas vemos nuestro pecho diariamente, pero… ¿lo conocemos lo suficiente? Llega ese momento en que quieres renovar tu fondo de armario de ropa interior y ¿qué haces? Te dejas seducir por los sujetadores más bonitos, atractivos, cómodos… Quieres el que más te favorezca, ¡normal! Sin embargo, hay muchas mujeres que se equivocan al escoger la talla y la copa de sus sujetadores.
¿Cómo es posible?
Las mujeres cometemos varios errores cuando vamos a comprar un sujetador. No nos fijamos en que la banda del contorno sube por la espalda, los tirantes nos aprietan demasiado, el aro queda por encima del pecho, la copa no es la adecuada por ser demasiado pequeña…
Son factores que no siempre tenemos en cuenta y que pueden provocar irritación, presión en el estómago o en los hombros, y una mala postura corporal. Además, no usar la talla adecuada, puede conllevar un pecho flácido y caído.
¡Y qué follón! Escoger puede ser complicado porque las tallas varían en función del modelo, la copa, los tejidos utilizados… Ante la duda, lo mejor sería pedir asesoramiento. El problema es que no todas las tiendas tienen una gran oferta de tallas y, entonces, nos toca escoger entre lo que hay… Un consejo: ¡pruébatelo siempre!
¡Elige el tuyo!
Acertar con el sujetador que está hecho para nosotras, según la forma de nuestro pecho y cuerpo, es un reto para toda mujer. Hay sujetadores para todo tipo de pechos: de pequeño volumen, grande, firmes, pesados, flácidos, asimétricos… Y esto, ¡es lo primero a tener en cuenta!
La mayoría de los modelos de sujetadores, disponen de diferentes tipos de copa. Si tu pecho es mediano o grande, opta por las de espuma ultrafina, las elásticas o las moldeadas. Por el contrario, si son pequeños apuesta por los push up. Sin olvidar esto, da el paso y compra el que mejor te sienta.
¿Qué modelo es para mi?
Balconnet: al tener una copa media, permite juntar y realzar el pecho. Sea cuál sea el volumen de tu pecho, tu escote será todavía más sensual. Y si tu pecho es pesado y necesitas más sujeción, prueba con el Balconnet Alto.
Full cup: se trata de un modelo con copa y esternón alto. Permite una perfecta sujeción y inmoviliza el pecho. Así que si tu pecho es pesado o flácido, prueba con este estilo de sujetador. ¡Seguro que no falla!
Plunge: es ideal para las que tenemos el pecho más separado, ya que permite juntarlo, pero sin aplastarlo. Esto es posible gracias a que tiene un esternón más bajo y en forma de “V”. Si tienes el pecho pequeño, está puede ser tu mejor opción.
Sweetheart: su escote tiene forma de corazón, como bien dice su nombre. En este caso, el pecho queda más junto y esbelto, ya que también tiene el esternón bajo. Por lo que es ideal para quienes tienen un pecho de pequeño volumen.
Half-cup: este tipo de sujetadores tienen una copa media-baja y forma de “U”, por lo que dejan al descubierto el cuello y son más escotados. Si tienes el pecho firme, está es tu gran elección.
Bandeau: es ese que tantas veces necesitamos y que, a menudo, nos trae problemas. Todas necesitamos un sujetador sin tirantes, por lo menos en alguna ocasión. Aunque, favorecen más a quienes tienen poco pecho. Si no es tu caso, puedes optar por versiones reforzadas del Bandeau, te quedarán mucho mejor.
Bustier: seguro que los has visto en todas las tiendas, ya que ahora están muy de moda. Son sujetadores más largos de lo normal, es decir, se alargan en la zona que queda por debajo de los aros. Es ideal para mujeres con un cuerpo firme.
Con refuerzo lateral: este modelo incorpora una sección vertical en el lateral de la copa, que sirve para evitar que el pecho salga por los lados, llevándolo hacia adelante. Es perfecto para pechos grandes.
Deportivo: sin duda, utilízalo si vas a hacer ejercicio. Mantiene el pecho sujeto, sin comprimirlo, para que no rebote y no sea molesto mientras practicamos deporte. Además, su tejido suele estar diseñado para secarse antes y aislar la humedad.