¿Mascar chicle o no mascarlo? Las diversas opiniones entorno a esta pregunta hacen de los chicles el objeto de un eterno debate. Por un lado, mascar chicles sin azúcar con xilitol tiene efectos beneficiosos. Al hacerlo, se produce una acción bucal limpiadora que combate la placa dental y el mal aliento. El xilitol además previene el deterioro del esmalte.
Además, mascar chicle puede ayudar contra la ansiedad, ya que produce un efecto calmante. Un estudio llevado a cabo por la Universidad de St. Lawrence, en EE UU, ha demostrado también que consumir goma de mascar provoca una la mayor fluidez de sangre al cerebro favoreciendo el aprendizaje.
No obstante, el mayor beneficio del chicle es que logra aumentar al doble la saliva en la boca, clave para neutralizar el ácido bucal más rápidamente, beneficiar la digestión y reducir el ácido en el esófago. Además, la saliva proporciona calcio y fosfato de hierro a los dientes. Sin embargo, el chicle también tiene efectos perjudiciales. El principal y más frecuente error es usarlo como substitutivo. Aunque ofrece beneficios en la higiene bucal, no logra limpiarla como si utilizáramos un cepillo de dientes.
Por otro lado, aunque pueda saciar el apetito, abusar de los chicles puede provocar irritación intestinal, acidez y gases. En altas dosis, el sorbitol, ingrediente utilizado para elaborar los chicles, causa diarreas. Más allá de dolores de mandíbula y del desgaste de articulaciones bucales, mascar chicle puede ser visto como una falta de modales. No es adecuado hacerlo en una reunión de trabajo, en clase o en una comida, por ejemplo.
Pros y contras de mascar chicle
Existe un eterno debate sobre si mascar chicle es bueno o malo. Y es que los chicles sin azúcar pueden tener beneficios higiénicos bucales, pero a su vez, son perjudiciales por varias razones.
