Imagina que quieres bailar, pero que también te preocupa sentirte tonificada, sin perder de vista esas sesiones de cardio que tanta energía te aportan. Pues bien, no le des muchas vueltas porque ya existe un tipo de entrenamiento con estas características. Se trata del Ballet Fit. Sí, tal y como lo lees, un plan de ejercicios que combina el ballet con el fitness y que ya es una de las últimas tendencias en la práctica de deporte en el mundo. Su creadora, Gloria Morales, sabe bien que el ballet no es cualquier movimiento fino y elegante. Hay mucho más detrás de una barra.
Qué mejor momento que hoy, en el Día Internacional de la Danza, para aproximarnos a este método con el que conseguir un cuerpo de bailarina mientras trabajas todas y cada una de sus partes. El plan que propone Morales es bien claro: un conjunto de entrenamientos de ballet combinados con elementos de fitness donde se trabaja la fuerza, la coordinación, la tonificación, el equilibrio y la flexibilidad.
¿Te parece poco? Pues el ejercicio no se queda solo ahí. Este método, tan practicado en España, Italia, México y Chile, cuenta con más de 700 instructores formados para impartir más de 1.500 clases cada semana.
Consigue un cuerpo de bailarina mientras te aprovechas de los múltiples beneficios que el ballet puede aportar en tu físico y tu salud mental.
Como vemos, el Ballet Fit se resume en una técnica que extrae lo mejor del ballet para quemar grasas, toxinas y liberar tensiones a través de la consciencia corporal y el crecimiento personal. Las personas que lo han probado lo tienen claro. Y es que, una figura armoniosa y elegante, como la de los bailarines profesionales, es posible siempre y cuando practiquemos paso a paso todo lo que el Ballet Fit puede enseñarnos. Apunta bien porque sí, ¡ha llegado para quedarse!
Si nos adentramos en el libro ‘Ballet Fit’, de Gloria Morales, nos encontramos con una multitud de consejos que nos enseñan a practicar este ejercicio. Un texto basado en este método revolucionario en el que, además, descubrimos la vida de Gloria: una apasionada del mundo de la danza desde que con 5 años se coló en una clase de ballet.

Desde entonces, Gloria Morales siempre ha estado vinculada de una manera u otra con el mundo del ballet. Hasta cuando hacía running necesitaba estirar de un modo poco habitual, es decir, tal y como a ella le pedía el cuerpo. Fue así como se encendió en su vida la llama del baile al que poco tiempo después decidió unir el fitness. Un combo que llega hasta nuestros días bajo la forma del Ballet Fit.
Visto el éxito que el ballet tenía entre adultos en EEUU, Gloria no perdió la oportunidad de dar respuesta a esta creciente demanda. Una actividad inclusiva y no exclusiva que a día de hoy ya se practica en varios países del mundo.

¿Qué es Ballet Fit?
Pero vayamos al centro de la cuestión. ¿Qué es Ballet Fit? ¿Cómo sería una de sus clases? Pues bien, te sorprendería saber que no es ni el ballet clásico de manual, ni tampoco una actividad en la que solo trabajas cardio. Es un híbrido entre ambos que saca el mayor provecho de las dos disciplinas.
Por ejemplo, según explica la creadora, las clases de Ballet Fit están divididas en varias partes con sesiones de ejercicios distintos a partir de los movimientos del ballet, sin perder de vista el ritmo de la música de piano al inicio y al final de la sesión, y con hits musicales en los bloques más intensos.
Un conjunto de entrenamientos de ballet combinados con elementos de fitness donde se trabaja la fuerza, la coordinación, la tonificación, el equilibrio y la flexibilidad.
De hecho, en estas sesiones no solo se pone Mozart o Bach. Aunque la música clásica forme parte del tradicional ballet, en este método se rompen esas reglas rígidas. Una misma clase puede alternar entre lo mejor de Beethoven y las canciones más sonadas de Beyoncé o Bruno Mars. ¿El resultado? Sesiones relajantes, pero también muy dinámicas. ¡El sueño de cualquier bailarín!
Con el tiempo, esta técnica ha ido evolucionando y, a día de hoy, las clases son de 50 minutos en las que se trabaja la fuerza, la coordinación, la tonificación, el equilibrio y la flexibilidad. Se trata de implicar a todo el cuerpo en los ejercicios cardiovasculares a través de clases que se dividen en la siguiente estructura:
1. Barre
Esta primera rutina quizá es la que más te recuerda al ballet clásico, ya que se trata de preparar el cuerpo con ejercicios de barra tradicionales durante 20 minutos. Una manera de activar y calentar el cuerpo para después poder trabajar la flexibilidad, el equilibrio y la tonificación muscular al completo.
2. Cardio
Llega el momento de activarnos completamente. En el segundo bloque y, durante 15 minutos, se hace un entrenamiento potente de cardio, basado en sencillas coreografías, pero muy estimulantes. Un momento perfecto para liberarnos del estrés, las toxinas y quemar calorías. Y todo ello al ritmo pegadizo de la música para que podamos expresarnos libremente a través de los movimientos más elegantes del ballet.

3. Floor
Una vez terminado el apartado de cardio, toca un bloque con una duración de 15 minutos. En este caso se trabaja una serie de ejercicios inspirados en los estiramientos de ballet, yoga o pilates, todos ellos realizados sobre una esterilla. El objetivo es poner en marcha la musculatura interna de varias partes del cuerpo, como el core, los glúteos o los brazos. Sin olvidarnos de la técnica de respiración, que también sirve para mejorar la flexibilidad y adaptar el cuerpo a las necesidades de cada persona.
4. Relajación
Por último, para dar por cerrada una sesión de Ballet Fit, se dedican unos minutos a completar la sesión con mindfulness. Es el momento de tocar tierra, volver a la calma y revisar con humildad el ejercicio realizado. Un trabajo de introspección y escucha que nos ayuda a sentirnos fuertes y optimistas hasta encontrar el equilibrio.
Ahora que ya conoces el Ballet Fit vamos a enumerar, uno a uno, los beneficios tanto físicos como psicológicos que esta disciplina puede aportarnos en nuestro día a día. Recuerda que solo necesitas dejarte llevar por la música mientras tonificas y estiras tu musculatura. De fondo, los ritmos de Beyoncé y Mozart animarán la sesión. ¡No te olvides de disfrutar!