Bailar, mover las caderas, liberar el cuerpo de las tensiones del día a día y enciende el fuego que llevas dentro. Este es el mantra de la danza del empoderamiento femenino. Una disciplina que combina movimientos de danza del vientre, danza polinesia, kundalini y ayurveda. ¿El propósito? Alcanzar el mayor bienestar posible a través del movimiento físico del cuerpo.
Y te preguntarás, ¿qué tiene de especial esta danza del empoderamiento? ¿Qué la diferencia del resto de bailes? Para empezar, se trata de una forma de ser y de bailar muy específica. Así la define la profesora de danza, Rous Baltrons, quien ha creado su propia versión: "Los Infinitos de tu Cuerpo", una disciplina que parte de la ciclicidad femenina y que, a través de movimientos repetitivos, guía a las alumnas hacia un proceso de reconexión con su fuerza interior.
Es justo de esa fuerza y conexión con el interior de donde proviene la idea del empoderamiento femenino. Una manera de conectar con nuestro cuerpo, con nuestras emociones y con esa sensualidad propia de cada mujer.
Todo esto nos lleva a relacionar esta filosofía con la de la danza útera, de la que hablamos hace poco tiempo por su capacidad para conectar útero-corazón y crear espacios protegidos para que las mujeres puedan ser ellas mismas, decidiendo cómo y de qué manera quieren moverse.
Son muchas las mujeres y profesionales de la meditación y el baile que, como Rous Baltrons o Nuria Peguera, trabajan proporcionando cursos y talleres relacionados con la danza y la fuerza que ésta puede otorgar a las mujeres, ayudándoles a habitar el espacio de una manera plena y consciente.
En el caso de Rous Baltrons, ya son más de 28.000 mujeres las que siguen en redes sociales los consejos de esta mujer con más de 20 años de experiencia como profesora de danza y más de 10 años como facilitadora de círculos y de retiros de mujeres. De hecho, un ejemplo de su éxito es su membría virtual de la Comunidad de Infinitos que solo hace que ganar adeptos desde su puesta en marcha en 2018.
Más de mil mujeres se encuentran virtualmente cada mes para bailar y disfrutar de los ejercicios específicos para el cuerpo de la mujer como meditaciones, danza-mantras, las prácticas de respiración o los mudras.
Los beneficios terapéuticos de la danza del empoderamiento femenino
Existen estudios que demuestran que la depresión afecta tres veces más a las mujeres que a los hombres y, justamente, "en esta tendencia de la mujer hacia la tristeza hay un componente hormonal y otro de género", explica Rous Baltrons. Por eso, una de las herramientas para mantenerse saludable y evitar caer en estados prolongados de tristeza es el movimiento. Moverse, como sea, pero activando esa fuerza que reside en el interior del cuerpo de la mujer.
“Muchas mujeres me escriben para explicarme cómo han recuperado la vitalidad, la motivación y la ilusión para vivir”, revela la facilitadora Rous Baltrons.
La clave de este tipo de baile está en este tipo de danza nutre la parte física, emocional y espiritual de las mujeres. Es decir, conecta el cuerpo y la mente para reactivar toda la energía que poseen. Pero ¿por qué decimos que es una danza terapéutica?
Debemos tener en cuenta que el cuerpo es un cajón inmenso que siente emociones, sentimientos y estados de ánimo y los almacena en órganos, músculos y células. Pero si no nos movemos, si no activamos todas esas emociones, con el tiempo puede que se vayan enquistando y nos vayan tensando más y más. Por algo se dice eso de, ¡libera tu cuerpo, libera tu mente!
La angustia, el miedo, la rabia, la frustración y la tristeza conviven en nuestro interior e incluso nos llevan a tomar una postura corporal u otra dependiendo de cómo nos sentimos. Para regenerar esos tejidos y empoderar a las mujeres, Rous Baltrons propone técnicas para mover el cuerpo femenino con las que generar cambios en la estructura neuronal para unir la comprensión cognitiva con la propia experiencia personal.
Baila para tu placer, no para el placer de otro
Como explicó Nuria Peguera en la Cumbre online Tu mujer salvaje: "El patriarcado pone en una caja hecha a su medida a la mujer y la obliga a comportarse de una determinada manera". Lo que Peguera confirma es que, durante años, la sensualidad, que es un don de la naturaleza de la mujer, ha quedado enterrada, sometida a las pretensiones de los otros.
Parte de esta danza del empoderamiento femenino pasa por recuperar lo que ancestralmente era de las mujeres, como la danza del vientre. Este tipo de baile, tradicionalmente, era una práctica que favorecía la conexión de la mujer con su fuerza interior, con la luna y con la sensualidad. Por ejemplo, los movimientos sinuosos de las caderas permiten despertar la creatividad y acompañar a otras mujeres en el parto.
“Desde que se impuso la sociedad patriarcal, este tipo de baila ha sufrido una degradación y se ha acabado convirtiendo en un espectáculo para el hombre, omitiendo lo sagrado de todos los movimientos y convirtiéndonos en meros objetos para el disfrute ajeno”, explica Rous Baltrons.
En los momentos de crisis globales o dificultades personales, el primer paso es bailar para reconectar con tu fuerza interior
Sin duda, 2020 ha sido un año complicado debido a la crisis social y sanitaria derivada de la Covid-19. Sin embargo, muchas mujeres han encontrado en este tipo de círculos femeninos la fuerza que necesitaban para hacer frente a uno de los años más convulsos desde hace décadas.
¿El secreto? El movimiento y la danza uniendo a las mujeres y las mujeres recobrando su empoderamiento a través de sus caderas, su sensualidad. Una manera de estar presente y conectar con su fuerza interior para construir la realidad que cada una desea.