Con el paso de los años, y conforme disminuye la producción de colágeno en nuestro organismo, nuestro rostro va perdiendo esa firmeza y luminosidad de cuando teníamos 20 años. Con el resto de partes del cuerpo ocurre los mismo. Para contrarrestar la flacidez o la pérdida de masa muscular, practicamos deporte de manera regular, tomamos determinados alimentos y ponemos mucha atención en nuestra rutina de belleza. Sin embargo, ¿por qué no dedicar el mismo tiempo en hacer unos estiramientos faciales igual que se hacen unas sentadillas o un saludo al sol? Sobre todo, si tenemos en cuenta que el rostro es uno de los lugares en los que más se percibe el paso del tiempo. Para desbancar a las arrugas y las bolsas, hay quien ya cuenta con su propio método revolucionario para lucir una piel sana y bella. El nombre, ya lo dice todo: yoga facial, y es la técnica que divulga la experta en belleza y autocuidado, Izumi Foraté, en su último libro "El secreto japonés del yoga facial: Realza la belleza natural de tu rostro y potencia tu bienestar".
De raíces euroasiáticas, la autora tiene muy claro que “el cuidado de la piel no solo se limita a aplicar buenos productos, sino que también se centra en fortalecer y relajar los músculos a través de técnicas de masaje y yoga facial. De este modo, podemos decir que la belleza del rostro también se trabaja desde el interior”, comenta.
Estamos acostumbrados a ver personas con un cuerpo tonificado y joven tras largas jornadas de gimnasio y fitness. Pero, ¿acaso hay quien dedique de manera rutinaria unos minutos a ejercitar los músculos de la cara? Quizá el fenómeno de Junko Ueno, conocida también por su método facial para eliminar arrugas e imperfecciones, ya ha causado suficiente furor como para que una parte de la población se dedique a estirar con regularidad el rostro. Aunque, probablemente, serán tan solo unos pocos. Mientras, el resto de la población continúa ajena a los beneficios de estos ejercicios para relajar y tonificar los músculos de la cara de forma totalmente natural, gratuita y sin aditivos de ningún tipo.
Yoga facial: la técnica que combina ejercicios y masaje
Esta técnica, que Izumi Forasté desarrolla en su libro paso por paso, se lleva practicando desde hace décadas en Japón. Su fórmula no es ningún secreto: combina ejercicios y masajes en la piel del rostro. Así de fácil.
El yoga facial es la práctica de ejercicios faciales para relajar y tonificar los músculos de la cara de forma totalmente natural
De hecho, nuestra cara tiene más de treinta músculos que usamos cada día sin darnos cuenta. Solo si los movilizamos de forma consciente, es decir, con una serie de ejercicios como los que propone el yoga facial, podemos mejorar la circulación sanguínea, oxigenar la piel, conseguir un efecto lifting o eliminar los signos de fatiga.
“Todo ello, a su vez, permite reducir el estrés que acumulamos en el día a día, el cual afecta directamente a la calidad de nuestra piel”, explica Izumi Forasté en su libro, donde aparecen 40 ejercicios de yoga facial que podrás adaptar a tus necesidades para trabajar distintas zonas del rostro, así como rutinas específicas para realzar tu belleza de forma totalmente natural con tan solo 5 minutos al día.
Beneficios del método facial
Uno de los objetivos del yoga facial es enseñarnos a relajar los músculos del rostro y del cuello, que muchas veces tenemos en tensión sin saberlo y que nos generan dolor corporal o malestar. Del mismo modo que las asanas del yoga corporal han permanecido durante siglos por su eficacia probada, los ejercicios de yoga facial también pueden perdurar con el paso de los años. Solo tenemos que prestar atención a los principales beneficios que estos estiramientos aportan a nuestro rostro:
- Reduce la hinchazón del rostro
- Aporta mayor firmeza con un efecto lifting
- Combate la flacidez
- Elimina la papada y marca el contorno facial
- Elimina bolsas y ojeras
- Eleva los párpados y abre la mirada
- La piel queda luminosa y con un tono más uniforme
- Sube las comisuras de los labios
- Se suaviza la piel
- Elimina la flacidez alrededor de los ojos
- Reduce y previene las arrugas
¿Te parece demasiado para ser real? Para ello, solo tienes que comprobarlo con una rutina de yoga facial cada mañana. En realidad, ¡solo necesitas 5 minutos! Al empezar te darás cuenta cómo el rostro se muestra hinchado al despertarnos, ya que, al estar estirados durante muchas horas, se estancan los líquidos en la cara. Izumi Forasté te sugiere una sencilla rutina que puedes realizar por la mañana, tras haberte aplicado tu crema hidratante habitual, y que sirve para activar la circulación y reducir el volumen facial.
Con estos ejercicios podrás observar cómo tu rostro mejora día tras día. Una mirada más despierta que te permitirá afrontar el día con toda vitalidad. Y es que, “al vernos y sentirnos mejor con la práctica de los ejercicios, reforzamos nuestra autoestima y mejoramos nuestro estado de ánimo”, tal y como explica la autora.
Por todo ello, si ya eres una personada apasionada del yoga, seguro que no tienes ningún problema en adaptar estos ejercicios en tu día a día. Para los recién iniciados, os dejamos ahora con una guía práctica para que os pongáis manos a la obra con este método de fama mundial. ¿El objetivo? Ya se sabe: una piel sana y firme durante mucho tiempo.
Créditos de imágenes: Mònica Prytz