La crema de alcachofas no es de las cremas de verduras más conocidas ni populares, pero su sabor es tan especial y es tan fácil de preparar, que puede ser un entrante perfecto para sorprender a nuestros invitados o a nuestra propia familia.
Además de ser muy sabrosa, esta crema tan sencilla y ligera tiene muchas propiedades beneficiosas para nuestra salud. Y es que la alcachofa es un alimento muy interesante tanto a nivel nutricional como a nivel gastronómico, ya que su sabor es muy particular, y se puede preparar de muchas formas diferentes.
La alcachofa
La alcachofa es la flor no madura de la alcachofera, una planta cuyo origen se sitúa en la cuenca del Mediterráneo y que ya se consumía miles de años antes de Cristo. Hoy en día, España es uno de los países con mayor producción de esta rica hortaliza, situándose en segundo lugar después de Italia, y siendo también uno de los países donde más se consume. Navarra, Levante, Andalucía y Cataluña son las principales regiones de cultivo.
La alcachofa protege y cuida nuestro hígado
Esta hortaliza, además de aportarnos minerales como el magnesio, el calcio o el potasio, nos aporta vitaminas del grupo B y vitamina C. Pero lo más destacable de todo es que es un alimento que protege y cuida nuestro hígado, gracias a la cinarina, uno de sus principios activos. Por esa razón, es especialmente interesante en casos de enfermedades hepáticas. Es además un alimento que contiene mucha fibra y muy pocas calorías, y que nos ayuda a eliminar toxinas gracias a sus propiedades diuréticas.
Esta es una crema muy reconfortante, que se prepara en menos de media hora con muy pocos ingredientes, y que gustará a todos ¡por su delicioso toque de limón!