Hace muchos años que soy muy fan de los porridges o gachas de avena en todas sus versiones. La versión más popular es la dulce, elaborada con ingredientes como frutas secas o frescas, o también con algún tipo de azúcar, sirope o miel.
Los porridges salados son menos conocidos, pero son deliciosos también, y por eso hoy quiero compartir una versión muy sencilla y muy fácil, que seguro que te encantará. Estos porridges son ideales para quienes les guste disfrutar de un desayuno salado reconfortante, o también como opción de almuerzo, brunch o cena.
El porridge, un plato muy recomendable
Un porridge es un plato de avena cocida que se prepara con agua, leche o bebida vegetal. Una vez la avena se cuece y se espesa, se sirve caliente o templada y se le añaden ingredientes por encima para hacer el plato más completo y agradable de comer.
En la versión dulce, se pueden utilizar frutas secas o frescas en la cocción, y fuera de ella, al servirse. Como toppings también pueden añadirse frutos secos, semillas y finalmente endulzar con sirope o miel.
En la versión salada, esos ingredientes dulces se sustituyen por otros como son las hortalizas o las especias y se le puede dar un último toque de sabor con algún ingrediente que aporte umami (ese sabor básico del que nos solemos olvidar), como puede ser un poco de salsa de soja o tamari, algún aceite, o incluso algún queso rallado o en polvo.
Si se sigue una dieta vegetariana, se puede completar el plato con alguna proteína de calidad como puede ser un huevo pochado, o tofu o tempeh marinados y hechos a la plancha. Si se sigue una dieta omnívora, el huevo sigue siendo una buenísima opción, pero si se prefiere, se puede incluir alguna otra proteína de origen animal.
A la hora de cocer la avena, utilizar un buen caldo vegetal es lo ideal, ya que le dará un mejor sabor a la preparación que el agua. Y, aunque se acostumbran a preparar con avena, se pueden preparar con cualquier otro cereal o pseudocereal en copos que nos guste, como pueden ser los de quinoa, trigo sarraceno, etc.
Anímate a probar esta versión salada de porridge, ¡y seguro que la repetirás en más de una ocasión!