Hoy es #8M y celebramos el Día de la Mujer más especial con una gran revolución feminista.
Por esto, queremos que tú te unas a este movimiento y seas (si es que todavía no lo eres) una mujer segura de ti misma seas quien seas y quieras a quien quieras.
Seguro que ya te reconoces en muchos de estos comportamientos ¿seguimos sumando?
Las mujeres seguras de sí mismas no hablan ni critican, sobre todo a otras mujeres.
Es normal dudar y meditar antes de tomar decisiones. Pero nunca, nunca, dudes de ti misma. Si estás haciendo algo, es porque lo tienes que hacer o lo quieres hacer. Y sobre todo, ¡lo puedes hacer!
Tú sabes lo que te gusta y lo que te sienta bien. No vistas igual que los demás solo porque está de moda. Y no sólo se aplica al estilismo, sino a todo en general: dietas, comidas, actitudes en el trabajo, etc.
¡Quiérete! Eres como eres y eso te hace única. No intentes ser alguien que no eres, el resultado va a ser pésimo. Hay muchas personas que están esperando a conocer alguien como tú (en el trabajo, el amor, en la amistad). Y quien no quiera, es que no te conviene.
A veces la lógica apunta a una decisión, pero tus entrañas parece que digan otra cosa. Sigue a tu instinto. No suele fallar.
Relativiza un poco. Si alguien no está de acuerdo con el proyecto que acabas de presentar, no te lo tomes personalmente. Seguro que le sigues gustando como profesional, simplemente es que tu trabajo no responde a lo que esperaba. Recoge las críticas constructivas y mejora. Esta regla también se puede aplicar en la vida personal: es normal tener diferencias con tu pareja, familiares y amigos. No quiere decir que no te quieran o no te valoren.
No sirve de nada pensar en lo negativo del pasado constantemente. Seguro que has podido aprender de tus fallos y muchas de esas cosas no te van a volver a pasar, o al menos, sabrás cómo reaccionar.
Si no fracasas es que no lo has intentado. Y si lo has intentado, es normal que no todo salga siempre bien. Tómate los fracasos como parte del camino hacia el éxito.
Métetelo en la cabeza. No siempre necesitas la aprobación de los demás. Cree en quien eres y en lo que haces.
La mujer de hierro con actitudes masculinas pasó a la historia. No debemos imitar a los hombres, sino explotar las cualidades que nos hacen únicas como mujeres. Cada una a su estilo.
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