El cálculo mental no debería dejarse nunca y, sin embargo, todos nos hemos vuelto muy vagos a la hora de trabajar con números. Calculadoras manuales, digitales, dispositivos móviles, incluso la memorización de los teléfonos han mermado nuestra capacidad para el ejercicio matemático. Pero este tiene muchos beneficios.
Los expertos señalan que gracias a él se desarrolla el sentido numérico y se mejoran algunas habilidades como la concentración, la atención, el aprendizaje y la memoria. Por ello, se recomienda que en la media de lo posible, y sobre todo en la etapa escolar se deje a un lado la calculadora y se emplee papel y lápiz para realizar los cálculos.
Ya en la etapa adulta se debería retomar este ejercicio ya que ayudará a frenar el deterioro cognitivo y los lapsos de memoria, además de ser útil para la vida diaria. Volver a mejorar nuestra relación con los números no es fácil y requiere paciencia y dedicación. Se trata de volver a aplicar los principios de las matemáticas y a resolver con agilidad los problemas que plantee. Para ello, existen aplicaciones para dispositivos electrónicos o para el ordenador que permiten realizar cálculos sencillos y aumentar el nivel de dificultad y así ganar cada vez más soltura.
También existen programas presenciales, especialmente dirigidos a niños, que mediante el uso del ábaco, en concreto el japonés denominado sorobán, se practican habilidades matemáticas, cálculo mental y resolución de problemas. Estos talleres han demostrado ayudar a estimular la inteligencia, la memoria visual y la capacidad de atención y concentración.
Cálculo mental: no lo dejes nunca
Calcular el precio de la compra, nuestro presupuesto semanal, cuánto nos costará ese artículo cuando sumemos las tasas? cualquier ejercicio matemático que hagamos mentalmente estimulará nuestra inteligencia y preservará la memoria.
