A menudo es inevitable que seamos pesimistas y que nuestra primera reacción ante una situación difícil sea afrontarla de manera catastrófica. Por eso, es muy importante aprender a hablar contigo misma, ver qué sientes y qué piensas exactamente y lo más importante, cómo solucionar el problema en cuestión. Entablar una conversación contigo misma puede ser una herramienta muy útil para darte cuenta de lo que sientes en primera instancia y de lo que realmente quieres sentir. Tú decides sobre cómo te afectan las cosas, pero lo más importante es saber qué preguntarte para poder responderte. Te dejamos algunas preguntas que pueden serte útiles en caso de no saber como afrontar una situación complicada que te genera estrés. Nosotros te proponemos 5 preguntas que puedes formularte ante una situación difícil y que también deberás ser capaz de responder con sinceridad.
Hazte las preguntas correctas y respóndelas
¿Es racional? Esta puede ser una de las preguntas ideales cuando estamos teniendo un pensamiento irracional, cuando estamos en un bucle negativo que no nos hace ver otra cosa más que todo negro. Sabremos que es así cuando exageremos o minimicemos las consecuencias de lo que pensemos, por ejemplo, o cuando lo llevemos todo hacia los extremos, es decir, el típico “todo o nada” de los perfeccionistas.
¿Cuál es el panorama general? ¿Seguro que toda tu vida es un desastre? Probablemente no. Ante un pensamiento negativo, en el que entres en bucle, piensa a continuación si no estás siendo excesivamente cruel contigo misma. Porque aunque hayas tenido una mala experiencia como, por ejemplo, perder el trabajo, pero eso no significa que debas reducir tu vida a escombros. Es más, siempre hay una salida y podrás elegir cómo reaccionar.
¿Vives tu vida? Sí, la tuya. No la que estaba pensada para ti. No la que tu familia espera. Si no la que tú quieres vivir. “No dejes que el ruido de las opiniones de otros ahogue tu propia voz interior”, decía Steve Jobs. Es lo que decía el fundador de Apple: “Ten el coraje de ser diferente, pero coherente con tus deseos”.
¿Qué es lo bueno de nuestra relación? “Cuando nos preguntamos qué va bien, entonces lo percibimos. Cuando lo percibimos, lo apreciamos. Cuando lo apreciamos, crece”, argumenta Reklau. ¿Qué le agradezco y aprecio de mi pareja? Siempre hay cosas que apreciar en una relación sana. Y si no tienes nada que apreciar sobre la tuya... Puede que sea el momento de revisarla y tomar decisiones al respecto.
¿Ves el fracaso como una catástrofe? Pues relativiza. Lo más probable es que vivas varios fracasos. Y que cuantos más fracasos experimentes, más cerca estés del éxito. Eso no significa que no deban afectarte. Sencillamente, que relativices porque tendrás más herramientas para superarlos.