Porque es bueno para la salud y para mantener la mente limpia y equilibrada, te damos una serie de consejos para conseguir relajarte. Buscar tu fórmula ideal es una práctica que beneficiará a tu cuerpo y mente y que podrás repetir cuantas veces necesites:
1. Sal a la calle, solo, respira y observa todo lo que hay a tu alrededor, el cielo o el horizonte. Aprende a volver a fijarte en las cosas y en su belleza.
2. Respira. Aléjate de tu puesto de trabajo, de tus compañeros, familiares o amigos, si lo necesitas. Respira y concéntrate en esa respiración. Ocho profundas inspiraciones y ocho profundas espiraciones. Mantén el ritmo durante un minuto.
3. Escribe todo aquello por lo que te sientes afortunado ahora mismo, aunque suene ridículo. Sigue escribiendo hasta el más mínimo detalle hasta que sonrías.
4. Busca un ritual que te recuerde que quieres reconectar con la vida: puede ser el acto de encender una vela, coger un objeto con significado o incluso meditar durante un minuto.
5. Cierra los ojos y siente todo lo que tu cuerpo está sintiendo: céntrate en tus sentidos, gusto, olfato, oído, tacto y si en algún lugar sientes dolor, imagina que sale de tu cuerpo.
6. Imagina una luz entrando en tu cuerpo y llenándolo por completo, iluminando cada rincón.
7. Muévete, libera endorfinas, baila con energía una canción que te guste, haz unos ejercicios, cualquier cosa que te haga sentir inmediatamente agotado.
8. Utiliza aceites esenciales y lo que cada uno de ellos te proporciona. Ábrelos cuando necesites algo de positivismo, limpieza e incluso alegría.
La relajación definitiva: paso a paso
Aprender a relajarse no es sencillo: requiere concentración y práctica, pero con esta guía resultará más sencillo introducirse en este apasionante mundo.

La relajación definitiva