Hay padres que temen este momento y creen que estarán meses persiguiendo al pequeño con la fregona en la mano, sin embargo, la 'operación pañal' puede ser todo un éxito tan solo teniendo en cuenta algunos detalles (y trucos) que a continuación te explicamos.
Lo más importante a tener en cuenta antes de darte algunos consejos para quitar el pañal con éxito este verano, es importante saber que es imprescindible hacerlo en el momento adecuado, sin agobios y sin prisas, con mucha paciencia y comprensión. Sí, no es tarea fácil ¡pero nada es imposible! Es importante recordar que cada niño es único y hay quienes están listos a los dos años, a los tres, y hasta los cinco es muy probable que por la noche siga llevando pañal.
¿Cómo saber si el pequeño está listo para quitarse el pañal?
La señal más evidente es cuando avisa a quien tiene a su alrededor de que tiene que hacer sus necesidades, aún llevando pañal. Es una muestra clara de que le sobra el pañal y sabe que sus necesidades puede hacerlas en otro lado. Y aunque a veces empiezan anunciándolo, es muy común que al principio sigan haciéndoselo encima, o justo al lado del váter o del orinal, o se les escape en el mismo instante en el que avisan. Porque una cosa es avisar y la otra es tener un control absoluto de sus esfínteres. Paso a paso.
¿Le causará un trauma la retirada del pañal?
Siempre y cuando no sea una obligación de los padres, no. Es importante también no reñir o mostrar frustación cuando se le escapen sus necesidades, porque se trata de un aprendizaje y como todo, lleva su tiempo. Hay que evitar acomplejar, comparar con otros niños, decir frases como "Los niños de tu clase ya van al váter solitos", "Tu hermana/o a tu edad ya no llevaba pañal". La clave para que sea un éxito es hacerlo con paciencia, detectando muy bien cuándo es el momento. Es cierto que el verano ayuda en todo el proceso de la operación pañal, aunque no es una norma universal y cada niño es único.
¿Por qué el verano es un buen momento para la operación pañal?
Además de que los niños llevan menos ropa y eso facilita todo momento SOS de necesidades urgentes (y en cualquier momento y lugar), los padres solemos pasar más tiempo con ellos y, por lo tanto, estar más predispuestos a este tipo de cambios y a prestarles nuestra atención durante más horas al día.
¿Qué voy a necesitar en la operación pañal?
Lo primero de todo: un orinal o un reductor de váter para ayudar al pequeño a ir al váter por sí mismo. También es posible optar por una escalera pequeña o un taburete para ayudarle a subir al inodoro. Por otro lado, fuera de casa se necesita mucha ropa de recambio, algún pañal por si lo pide, se recomienda llevar un orinal de viaje o reductor por si pide ir al baño en un lugar público... Y si se lo quitáis también por la noche: protectores impermeables de colchón.
¿Qué pasa si me he precipitado?
Rectificar es de sabios y en este caso aún más. Si hay que dar marcha atrás en el proceso porque en realidad aún no está preparado para quitarse el pañal, se lo volvéis a poner y poco a poco le recordáis que tiene el orinal a su disposición. Sin agobiarle demasiado para que no lo sienta como una obligación, ya que el proceso saldrá mejor cuanto más natural sea todo.
¿Cómo planteárselo por primera vez?
Muy fácil: enseñándole para qué sirve el orinal y explicándole que le ayudaréis en todo el proceso.