• Home

  • Mente

  • Ir al psicólogo: ¿llevas años en terapia y no mejoras?

Ir al psicólogo: ¿llevas años en terapia y no mejoras?

La piedra angular de cualquier terapia es el conocido como 'rapport' o vínculo que se genera entre psicólogo y paciente. En ocasiones ese vínculo puede quedar comprometido hasta tal punto que la confianza con el terapeuta puede romperse.

Ir al psicólogo: ¿llevas años en terapia y no mejoras?
Ir al psicólogo: ¿llevas años en terapia y no mejoras?
Daniel Vilosa

Periodista

La conexión con el psicólogo es muy importante para poder avanzar en el proceso de mejorar tu salud mental, ya que es el punto de partida y la base sobre la que ambos construyen el cambio en la persona que busca ayuda.

¿Qué significa hacer terapia?

No existe una única definición, pero sí podemos determinar que el psicólogo realiza un acompañamiento terapéutico en el que apadrina a un paciente donde van abriéndose puertas de memoria a temas íntimos que a lo mejor el paciente no ha compartido nunca.

Esos temas, además, requieren un espacio de seguridad psicológica: es decir, el paciente debe poder expresarse sin tensión, sin miedo a ser criticado y sin miedo a perder oportunidades de explicar lo que le está sucediendo. Ese espacio de seguridad no suele encontrarse en el mundo exterior.

La relación con el terapeuta no es de amistad, sino colaborativa, de manera que a medida que pasa el tiempo y la confianza crece y se afianza de sesión en sesión, el paciente empieza a sentirse seguro y capaz de introducir pequeños cambios que lo ayudarán en su evolución y crecimiento personal.

Sin embargo, en ocasiones ese crecimiento personal se interrumpe o deteriora, y tanto el especialista como los pacientes tenemos la posibilidad de levantar la mano y plantear abiertamente el problema.

La relación del psicólogo y el paciente es fundamental para el éxito de la terapia
 

Las principales terapias psicológicas

No podríamos afirmar que existen infinidad de terapias psicológicas, pero sí existen suficientes como para entretenernos a la hora de investigar por nuestra cuenta cuál sería la que mejor nos podría funcionar. A continuación, listamos 4 terapias cuyos nombres nos resuenan a todos, aunque a menudo no sabemos qué quieren decir exactamente.

  • Psicoanálisis. Esta práctica terapéutica fue fundada por el neurólogo austríaco Sigmund Freud hacia 1896. Su objetivo es investigar y tratar los problemas emocionales desde diferentes puntos de vista, siendo los más habituales la infancia de la persona, la interpretación de los sueños, los actos fallidos y la técnica de asociación libre.
     
  • Técnica cognitiva conductual. Según la Clínica Mayo, la terapia cognitiva conductual te ayuda a tomar conciencia de pensamientos imprecisos o negativos para que puedas visualizar situaciones exigentes con mayor claridad y responder a ellas de forma más efectiva. En este tipo de terapias es habitual confrontar a los pacientes a sentimientos, emociones y experiencias dolorosas para ayudarles a superarlos.
     
  • Terapia breve estratégica. En este tipo de terapia el especialista se centra en resolver y dar soluciones a problemas complejos mediante herramientas simples, planificadas e intencionadas. Analiza las soluciones previas que se han ido adoptando para resolver conflictos, pero que no han funcionado. Así, la terapia breve estratética (TBE) busca nuevas soluciones a problemas antiguos.
     
  • Psicología con hipnosis clínica. Durante este procedimiento el terapeuta lleva a al paciente a un estado hipnótico (sueño) para ayudarlo a aliviar su dolor emocional. Se produce un estado de conciencia alterado que activa un proceso mental e incluso la participación del cuerpo. Es un diálogo real entre hemisferios en el que se produce una comunicación de la mente con la mente.  


¿Cuándo se rompe el vínculo con el terapeuta?

El vínculo con el terapeuta puede romperse cuando se produce uno de los siguientes tres errores:

  1. Un error de calibrado. En la entrevista inicial, el terapeuta calibra, es decir, ajusta la comunicación o los registros comunicativos que tendrá esa relación. Si el psicólogo se salta ese paso, puede ser que el acercamiento que realice en las futuras sesiones pueda no resuenen positivamente a la persona, o peor aún, que puedan ofender de alguna manera. Cuando esto ocurre, se produce una incongruencia, que puede producir efectos negativos en los clientes.
     
  2. El terapeuta no se responsabiliza de los límites de la terapia. El psicólogo es quien debe establecer el marco de referencia que servirá para que el paciente se sienta seguro y pueda evolucionar favorablemente. El psicólogo es, además, responsable de asegurar que el cliente puede poner los límites que considere necesarios durante su proceso terapéutico.
     
  3. Consensuar los objetivos de terapia. Un ejemplo para comprender esta situación: asistes a terapia porque quieres reducir la ansiedad que se produce en el trabajo, pero el psicólogo se muestra partidario de revisar durante diez sesiones el pasado de esa persona. Es posible que en ese caso el objetivo de la terapia no quede claro, y de ser así sería conveniente volver a ponerlos sobre la mesa. Otra cosa es que el especialista considere que esa revisión del pasado es positiva, siempre que explicite las razones al paciente.  
Si el vínculo con el terapeuta se rompe, en algunas ocasiones se puede recuperar hablando la situación
 

¿Por qué a veces decimos que un psicólogo es bueno para una persona, pero no para otra?

La salud mental es un universo de recovecos escondidos y no siempre fáciles de comprender. Los psicólogos, como ocurre con otras profesiones, se especializan en cada una de sus vertientes: ansiedad, adicciones, trastornos de la conducta alimentaria (TCA), terapia de parejas, entre muchas más.

Dependiendo de cuál sea el motivo de consulta, podemos acercarnos a un especialista u otro, aunque la garantía de éxito no siempre es segura: una cosa es que domine la temática, y otra es que tenga los recursos suficientes para empatizar y comunicar un nuevo camino de exploración individual.



El psicólogo y formador Benjamín Porras afirma que por un lado tiene que haber mucha honestidad por parte del terapeuta. Debe saber, deontológicamente, si la terapia está progresando o no. Por otro lado está la responsabilidad del paciente: ¿integra los ejercicios que le propone el psicólogo? ¿Aplica los recursos aprendidos en terapia?

Hay personas a las que les cuesta aterrizar las propuestas terapéuticas y es posible que necesiten más tiempo. Una parte importante del éxito de una terapia tiene que ver con los resultados consensuados en las sesiones.

¿Cuáles son las señales de que la terapia no funciona?

Aunque, como decíamos, no todo el mundo es igual, las principales señales de que el proceso no va bien son:

  1. Las sesiones empiezan a ser repetitivas. Son un calco de otras sesiones, que tienen siempre las mismas respuestas. No se experimentan nuevos ejercicios o dinámicas.
  2. El paciente ha perdido el compromiso con la terapia. No pone en práctica los consensos alcanzados durante el proceso y tiene deseos de abandonar.
  3. Se produce incomodidad. El paciente no siente que el lugar sea un espacio cómodo o seguro para hablar libremente de su intimidad. 
     

Si te suena alguna de estas tres situaciones, no todo está perdido. Porras recuerda que de la misma manera que el primer día estableciste cuáles eran tus objetivos, comunícate con tu psicólogo y dile abiertamente que la terapia, o bien no está funcionando, o bien no está entrando donde debería. Los terapeutas estamos preparados para un cambio de enfoque. Y si es necesario un cambio de estrategia, la derivación a otro especialista también podría ser una solución. Tu psicólogo clínico puede ayudarte a alcanzar una buena salud mental, pero para ello debe haber comunicación, honestidad y compromiso.

Sobre el autor
Daniel Vilosa

Daniel es periodista especializado en salud y bienestar. Actualmente es el fundador de Agencia Vilo, una agencia de comunicación en Barcelona especializada en el sector de eHealth, en la que un grupo de especialistas en marketing digital y estrategia ofrece soluciones para empresas y start ups que desean impulsar sus organizaciones en el universo digital.

Además de crear Agencia Vilo, desde hace varios años es profesor de Storytelling y Content Marketing de la Toulouse Business School, con sede también en Barcelona, donde imparte clases a alumnos de Bachelor y Master sobre las últimas tendencias en generación de contenidos. 

En su amplia trayectoria como periodista freelance ha realizado acciones de comunicación muy diversas, desde la difusión de organizaciones en medios de comunicación, inbound marketing y la redacción de artículos para empresas vinculadas al mundo de la salud. Comparte su know how en Objetivo Bienestar con artículos sobre salud sexual masculina. Puedes leer todos sus artículos aquí

Descubre más sobre:

Nos vamos de shopping

  1. 10 suplementos veganos para mejorar tu salud portada
    shopping icon salud
    10 suplementos veganos para mejorar tu salud
    Comprar​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​  
  2. 8 utensilios top de cocina ligera de verano
    shopping icon nature
    8 utensilios top de cocina ligera
    Comprar​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​
  3. Con cafeína
    shopping icon food
    Qué cafetera se adapta más a ti
    Comprar​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​

Lo más leído